Se licuó la sangre de San Genaro
El arzobispo de Nápoles, Domenico Battaglia, anunció este domingo que «la sangre se ha licuado», mostrando la reliquia de San Genaro, patrono de la ciudad, para veneración y júbilo de los fieles. La sangre de este mártir del siglo III, que se custodia en la catedral, se licúa milagrosamente tres veces al año: el primer domingo de mayo, el 19 de septiembre (su fiesta) y el 16 de diciembre (conmemoración del milagro con el que el santo salvó a la ciudad de la lava del Vesubio).