El Sindicato de Profesores de Religión de Cataluña (PREC) ha denunciado posibles irregularidades en la contratación de más de 200 profesores de religión católica de centros educativos públicos, ya que trabajan bajo contrato temporal y no indefinido. 

El sindicato ha anunciado que pondrá en conocimiento de la inspección de trabajo la posible contratación "en fraude de ley" si el Departamento de Educación mantiene esta práctica este curso.

El sindicato de profesores de religión recuerda que ya tres sentencias han dado la razón a docentes de Barcelona, Sabadell y Granollers.

Según el PREC, el real decreto que regula la contratación de profesores de religión en centros públicos establece que "el contrato será de carácter indefinido excepto en los casos de substitución del titular", práctica cuyo incumplimiento "condena a la precariedad a los nuevos docentes".

En el comunicado, el PREC ha pedido a los obispos coordinados en la Conferencia Episcopal Tarraconense que "ponga los medios posibles para revertir esta situación" que "perjudica directamente la calidad de la docencia", y ha amenazado con interponer una demanda colectiva para "reclamar por la vía judicial el reconocimiento de la contratación indefinida de los docentes", como ya ha sucedido en otras comunidades autónomas. 

Maniobras y trucos contra la clase de religión

Recientemente la asociación E-Cristians exigía a la Generalitat que garantizase la oferta de la asignatura de religión e impidiese las maniobras de directores y activistas contrarios a esta asignatura, numerosos en Cataluña, que la esconden, no la ofrecen o tratan de disuadir a los padres.

Ya en 2019  el sindicato de profesores de religión PREC (www.prec.cat) denunciaba que «en muchas escuelas y centros de enseñanza secundaria se ejerce abiertamente un boicot a la misma» y que «muchas escuelas se niegan a ofrecer la materia y a los profesores los obligan a impartir otra, aconfesional», denunciaba el presidente de PREC, Ignacio Díaz. 

Un estudio de 2019 realizado por PREC revelaba que 700 centros (escuelas e institutos) de Cataluña no impartían actualmente la materia y que en la provincia de Barcelona la proporción era exagerada: más de un 45 por ciento de las escuelas y un 14 por ciento de los institutos no la daban , según los datos de preinscripción. «No deja de ser sospechoso que en una misma zona, a pocos metros de distancia, en un centro se imparta y en otro no», denunciaba Ignacio Díaz.

En 2017, el Documental Oremus mostraba los trucos que se usan para dificultar la clase de religión en las escuelas catalanas, como denunciaban asociaciones, profesores de la asignatura y obispos.