De Tirol del Sur, es el actual número uno mundial; regaló una raqueta al Papa
De la broma al divertido encuentro; el tenista Sinner visita a León XIV: «¿Quiere que juguemos?»
El tenista Jannik Sinner visitó al Papa León XIV, que sigue este deporte y que lo ha jugado hasta hace poco
En su encuentro con miles de periodistas el lunes, el Papa León XIV bromeó acerca de la idea de que le pudieran hacer jugar con el tenista italiano Jannik Sinner, actual número uno mundial, cuyo apellido en inglés, la lengua nativa del Papa, significa "pecador". El Papa disfruta del tenis y a menudo ha jugado en la cancha del cercano Instituto Patrístico Augustinianum.
Pero sí, para sorpresa de todos, el popular tenista se acercó al Vaticano, al Aula Pablo VI, junto con sus padres, Hanspeter y Siglinde, y con el presidente de la Federación Italiana de Tenis, Angelo Binaghi. El tenista regaló al Papa una copia de su raqueta blanca y negra. Y rompió el hielo planteando con humor: "Aquí hay una pelota, ¿quiere que juguemos un poco?"
León XIV, divertido, respondió: "¿Aquí? Podríamos romper algo"
El campeón tenista y su familia son de Tirol del Sur, donde muchos hablan tanto italiano como alemán. El Papa preguntó a la familia sobre qué idiomas usan en casa. También sobre el campeonato de tenis que tiene lugar estos días en la capital italiana y que el Papa está siguiendo. "¿Cómo te ves en Roma?", preguntó el Pontífice. El deportista respondió que está adaptándose al ritmo necesario. "Coraggio!", le exhortó León XIV.
Cuando el Pontífice recogió la raqueta que le regalaba dijo, con humor: «Me dejarían jugar en Wimbledon».
Me dejarían jugar en Wimbledon, bromea el Papa León XIV con Jannik Sinner, número uno mundial
En una entrevista hace 2 años, el entonces cardenal Robert Prevost explicó que el tenis le gustaba mucho, pero que desde que era cardenal en Roma casi no podía jugar. Tenía entonces 68 años. En septiembre cumplirá 70. En Chiclayo solía entrenar con otros sacerdotes, incluyendo quien hoy es su secretario personal, Edgar Rimaycuna Inga.
Angelo Binaghi, presidente de la Federación Italiana de Tenis, declaró tras el encuentro: «Hemos encontrado a un verdadero Papa del tenis, un tenista apasionado. Ha sido una grata sorpresa». Binaghi añadió que el Pontífice felicitó a los deportistas "por el mensaje que transmiten, sobre todo fuera del campo, con su sencillez y su respeto por los rivales. Es un mensaje de solidaridad, de inclusión, de amistad; son auténticos portadores de paz".