El inquilino de la chimenea
EL PADRE LORENZO CASTRO OFM CONV, UN MÁRTIR SUPERVIVIENTE

Federico Jiménez de Cisneros durante su conferencia el pasado 18 de octubre, en Sevilla.
El pasado 18 de octubre, en Sevilla, durante las XIII Jornadas Martiriales, el subdirector de las mismas Federico Jiménez de Cisneros dio a conocer la figura de fray Lorenzo Castro del Río. Natural de la provincia de Palencia, nació en el año 1912, y con catorce años, en 1926, ingresó en el seminario franciscano conventual que se encontraba en Granollers (Barcelona). En el año 1933, con 21 años, fue enviado al Colegio Internacional de la Orden en Roma, donde se licenció en Teología. En Italia hizo la profesión solemne en 1934 y recibió el orden sacerdotal el 28 de junio de 1934. Regresa en el verano de 1935 a Granollers, que era entonces el único convento de la Orden de Franciscanos Conventuales en tierras españolas. Cuando el 18 de julio de 1936 se produce el Alzamiento Nacional contra el gobierno republicano del Frente Popular, y tras el fracaso de la rebelión en gran parte de España, y en concreto en Cataluña, los revolucionarios toman el poder y establecen un régimen de persecución religiosa por el cual pretenden el exterminio de los religiosos. En Granollers vivían trece religiosos en la comunidad del convento franciscano, y seis de ellos sufrieron el martirio. Actualmente son beatos; san Juan Pablo II los beatificó el 11 de marzo de 2001.

Los hermanos Alfonso, Miguel, Modesto, Dionisio, Francisco y Pedro pertenecían al convento de Granollers (Barcelona).
EL INQUILINO DE LA CHIMENEA [para descargar]
En sus memorias autobiográficas, el padre Lorenzo Castro cuenta las peripecias que sufrió, su encarcelamiento, la saca de la prisión, su fuga en la noche y los disparos, y cómo buscaba refugio en sucesivas casas, que abandonaba para no comprometer a los dueños y que fueran fusilados por haber escondido al religioso. De esta forma, le ofrecieron un escondite verdaderamente original: la chimenea de una masía, de una casa de campo, de forma que se ocultara dentro y a deshora pudiera salir de su escondite y moverse un poco. Cuando habían pasado dos años de guerra, pudo salir y prudentemente presentarse a las autoridades
republicanas, que en 1938 prometieron respetar la vida de los religiosos, y destinarlos a misiones sanitarias, como así sucedió, y llegó de esta forma al final de la guerra.

Fray Lorenzo Castro del Río, franciscano conventual (1912-2000), en una foto de sus últimos años.
Aquí la conferencia completa de Jiménez de Cisneros que lleva por título El padre Lorenzo Castro OFM CONV, un mártir superviviente. Y para escucharla:
Federico Jiménez de Cisneros comenzaba por el final de los días de Fray Lorenzo Castro en Sevilla:
«Providencialmente, tuve ocasión de hablar con él en algunas ocasiones, y participar en la Misa que diariamente, a primera hora de la mañana, celebraba en la capilla de la beata Ana
María, en el Colegio de Nuestra Señora de los Reyes en el Parque Alcosa, centro de Educación Infantil regentado entonces por las Religiosas de San José de Cluny. Diariamente predicaba dos
minutos, generalmente centrado en el santo del día, y recuerdo que esa idea nos ayudaba a todos los asistentes a centrar el día.
Parque Alcosa es un barrio, que dicen toma su nombre de las iniciales del promotor, el constructor valenciano Alfredo Corral Sociedad Anónima, y la parroquia tiene el nombre de Nuestra Señora de los Desamparados, patrona de Valencia, cuya imagen veneran en el interior del templo. Esta parroquia está encomendada a los franciscanos conventuales y ahí estuvo
destinado el padre Castro durante más de un cuarto de siglo».
Finalmente este vídeo del 19 de enero de 1992 en donde habla el padre Castro en la inauguración de la plaza que lleva su nombre.

El Ministro Provincial de los Franciscanos Conventuales en Sevilla junto al conferenciante.
A la conferencia sobre Fray Lorenzo Castro asistió fray Juan Antonio Adánez Silván, OFM Conv. Ministro provincial de los Franciscanos Conventuales de la Provincia de “Ntra. Sra. de Montserrat” de España, quién también dio testimonio personal de su primer año como sacerdote junto a Fray Lorenzo. Declaró que no podía perderse este homenaje del padre Castro.

Amigos de Fray Lorenzo de la parroquia sevillana de Alcosa en el salón regio del Real Círculo de Labradores de Sevilla