Jueves, 28 de marzo de 2024

Religión en Libertad

Francisco el rebelde


Una vibrante arenga del Papa contra la ideología de género, que él tacha de "verdadera colonización ideológica" a escala mundial... El circuito de los grandes medios de comunicación ha ignorado prácticamente estas palabras de Francisco, enriquecidas además por una importante cita del Papa emérito.

por Sandro Magister

Opinión

Rompiendo la inicial consigna de silencio, la Santa Sede ha hecho pública hace algunos días la transcripción del coloquio a puertas cerradas entre el Papa Francisco y los obispos de Polonia que tuvo lugar en Cracovia, en el primer día de su viaje a ese país, el 27 de julio.

Una razón de esta insólita publicación ex post ha sido, probablemente, la voluntad de detener las indiscreciones que circulaban acerca del contenido de ese coloquio, sobre todo en lo que atañe a la comunión a los divorciados que se han vuelto a casar, vista la unísona oposición de los obispos polacos a cualquier rendición en materia.

Efectivamente, al leer la transcripción del largo coloquio, no se encuentra ninguna alusión a Amoris Laetitia ni a las correspondientes controversias.

Pero hacia el final se descubre una vibrante arenga del Papa contra la ideología de género, que él tacha de "verdadera colonización ideológica" a escala mundial.

He aquí, a continuación, sus palabras textuales:

"En Europa, América, América Latina, África, en algunos países de Asia, hay verdaderas colonizaciones ideológicas. Y una de estas –lo digo claramente con nombre y apellido– es el 'gender'. Hoy a los niños –a los niños– en la escuela se enseña esto: que cada uno puede elegir el sexo. ¿Por qué enseñan esto? Porque los libros son los de las personas y de las instituciones que dan el dinero. Son las colonizaciones ideológicas, sostenidas también por países muy influyentes. Y esto es terrible. Hablando con Papa Benedicto, que está bien y tiene un pensamiento claro, me decía: 'Santidad, esta es la época del pecado contra Dios creador'. Es inteligente. Dios ha creado al hombre y a la mujer; Dios ha creado al mundo así, así, y nosotros estamos haciendo lo contrario. Dios nos dio un estado 'inculto' para que nosotros lo transformáramos en cultura; y después, con esta cultura, hacemos cosas que nos devuelven al estado 'inculto'. Lo que ha dicho el Papa Benedicto tenemos que pensarlo: 'Es la época del pecado contra Dios creador'".

El circuito de los grandes medios de comunicación ha ignorado prácticamente estas palabras de Francisco, enriquecidas además por una importante cita del Papa emérito. Y no hay que asombrarse, porque esto es lo que sucede cada vez que Francisco dice algo que chirría con su imagen mediática dominante, la de Papa abierto a la modernidad.

Pero el caso es que ha dicho esas cosas, como ha sucedido en el pasado. Y podemos suponer que no han sido bien acogidas por aquellos sectores de la Iglesia que defienden una modernización drástica de la doctrina católica en materia de género, homosexualidad y "matrimonio" entre personas del mismo sexo.

Estos sectores eclesiales están muy presentes y activos sobre todo en el centro de Europa, con muchos obispos y teólogos en primera fila.

Pero también es verdad que estas tendencias modernistas encuentran la oposición de sectores más amplios de la Iglesia mundial, para los que las palabras del Papa Francisco en Cracovia contra la ideología de género son música para sus oídos.

Un ejemplo entre muchos de este frente de resistencia es la carta pastoral publicada a finales de noviembre de 2015 –es decir, al término del sínodo sobre la familia– por los obispos de Australia, y que estaba dirigida no sólo a los católicos, sino a todos los ciudadanos de este país.

En esta carta, los obispos australianos defienden con fuerza la visión original del matrimonio entre hombre y mujer respecto a la "confusión" fomentada por el denominado "matrimonio homosexual".

Pero no se limitan a denunciar dicha insidia. También la documentan enumerando una serie de casos sucedidos en varios países de Occidente que testimonian la agresividad de la nueva ideología, hasta el punto de hacer que el matrimonio entre un hombre y una mujer sea "una verdad que ya no se puede decir", so pena de ser penalizado y humillado.

Publicado en L'Espresso (www.chiesa.espressonline.it)
Comentarios
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda