El arzobispo de la Seo de Urgell y copríncipe de Andorra, monseñor Joan Enric Vives, ha expresado su preocupación por el malestar ciudadano que ha provocado la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut, así como por la coyuntura económica derivada de la crisis.

Ha recordado que la Iglesia y los obispos catalanes, a lo largo de la historia, «han sostenido la causa nacional catalana, con su cultura, su lengua y sus instituciones» y se ha mostrado convencido de que continuarán haciéndolo «como compromiso pastoral» con sus fieles, a quien recordó que deben servir.

En su Visita Pastoral a varias parroquias de Lleida, Vives ha reiterado que la Iglesia promueve un diálogo y un entendimiento fundados «en el respeto de las diferentes identidades y el reconocimiento de los legítimos derechos de los hombres y de los pueblos, especialmente los más desfavorecidos o en minoría».