León XIV manda tarea para fin de año: hacer examen de conciencia y pedir perdón por los pecados

Este miércoles tuvo lugar en la Plaza de San Pedro la última audiencia general del año, una catequesis que León XIV comentó recordando "eventos felices", como el Jubileo con "la peregrinación de tantos fieles con ocasión del Año Santo", y otros "dolorosos", como la muerte del "añorado" Papa Francisco y "los escenarios de guerra que siguen devastando el planeta".

Un Te Deum de gratitud

Todo ello hay que ponerlo ahora ante el Señor y pedirle que "se renueven los prodigios de su gracia y de su misericordia", como se hace en la tradición del solemne Te Deum que él mismo dirigirá por la tarde en la basílica de San Pedro en una "atmósfera de alabanza, asombro y agradecimiento", palabras estas últimas de Francisco hace dos años en la misma solemnidad de María Santísma Madre de Dios, que celebra la Iglesia el 31 de diciembre.

Examen de conciencia del año

León XIV recordó una tarea propia de un día como éste, cuando "estamos llamados a meditar sobre lo que el Señor ha hecho por nosotros el año pasado, así como también a hacer un honesto examen de conciencia, a valorar nuestra respuesta a sus dones y a pedir perdón por todos los momentos en los que no hemos sabido atesorar sus inspiraciones e invertir mejor los talentos que nos ha confiado".

Como se ha hecho patente más que nunca en este Año Santo, con millones de peregrinos acudiendo a Roma, "nuestra vida es un viaje, cuya meta última transciende el espacio y el tiempo, para cumplirse en el encuentro con Dios y en la plena y eterna comunión con Él". Es en esa "perspectiva escatológica" como hay que interpretar el paso de la Puerta Santa, en el que rezamos pidiendo "indulgencia para nosotros y para nuestros seres queridos".

Todo ello, añadió el Papa, "expresa nuestro sí a Dios, que con su perdón nos invita a cruzar el umbral de una vida nueva, animada por la gracia, modelada en el Evangelio", un sí a "una vida vivida con compromiso en el presente y orientada a la eternidad".

El espíritu de la Navidad para santos, pecadores y paganos

León XIV citó una frase de San León Magno para explicar el espíritu y el ánimo con el que hay que afrontar este periodo del año en el que contemplamos a Jesús nacido: "Que exulte el santo, porque se acerca la recompensa; que se alegre el pecador, porque se le ha ofrecido el perdón; que recupere el ánimo el pagano, porque está llamado a la vida".

Esta invitación se dirige "a nosotros, pecadores, para que, perdonados, con su gracia podamos levantarnos y volvernos a poner en marcha", concluyó el pontífice, casi a modo de felicitación de Año Nuevo: "Que nos acompañen estos pensamientos en el paso entre el viejo y el nuevo año y después siempre en nuestra vida".