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EVANGELIO

La lámpara se pone en el candelero para que los que entren vean la luz.

Lectura del santo Evangelio según san Lucas 8, 16-18

En aquel tiempo, dijo Jesús al gentío:
«Nadie ha encendido una lámpara, la tapa con una vasija o la mete debajo de la cama; sino que la pone en el candelero para que los que entren vean la luz.
Pues nada hay oculto que no llegue a descubrirse ni nada secreto que no llegue a saberse y hacerse público.
Mirad, pues, cómo oís. pues al que tiene se le dará y al que no tiene se le quitará hasta lo que cree tener».

Palabra del Señor.

Vean la luz.

Al que tiene se le dará. Al que se llena del Señor, se le dará. Al que sólo tiene conocimientos y teoría se le quitará hasta lo que cree tener, porque realmente no tiene nada.
Por eso en la Asociación nos llamamos Esposos Eucarísticos Misioneros, porque para poder ser Misioneros, primero hay que ser un esposo que mira su Sacramento con los ojos de la fe, escucha la Palabra con los oídos de la fe, y vive la Eucaristía en Su matrimonio.
Por eso, vamos a ocuparnos de que los colaboradores de la Asociación que promueve Proyecto Amor Conyugal, sean luz para los esposos que se acercan.

Aterrizado a la vida matrimonial:

Almudena: Cuanto más vivo contigo el camino del Señor, más me enamoro de ti y de mi vocación. Más veo todo lo que ocurre entre nosotros como designio divino. Más me ayuda en el desasimiento de todo lo creado para ser sólo para ti y para Dios.
Antonio: ¿Cómo hemos podido estar todos estos años sin descubrir la grandeza del misterio de Dios en nuestra vida? Ahora mi vida es Vida, tú eres otra y puedo amarte con veneración, nuestro matrimonio es parte del Gran Misterio, nuestra misión participa de la Redención...
Almudena: Nuestra vida ha adquirido una dimensión nueva. Y por eso hay tantos que se acercan a nosotros pidiendo ayuda, porque están como ovejas sin Pastor.

Madre,

¿Cómo puede Dios hacernos tan partícipes de Sus misterios? Él nunca deja de sorprendernos. Alabado sea por siempre.