Toda la fecundidad de la Iglesia depende de la Cruz de Cristo, dijo en la misa
León XIV, con la cruz del peregrino: celebró el Jubileo de la Santa Sede

León XIV con la cruz de peregrino jubilar en el Jubileo de la Santa Sede, este Lunes de Pentecostés
El Jubileo de la Santa Sede ha alcanzado su momento más emblemático con la participación del Papa León XIV como peregrino de la esperanza. El Pontífice encabezó una solemne procesión jubilar, acompañado por cardenales, obispos, sacerdotes y fieles laicos. Vestía el color azul ligado a las fiestas de la Virgen, por celebrarse la liturgia de María, Madre de la Iglesia.
La multitud de peregrinos, reunidos en la Plaza de San Pedro, observó con devoción el paso del Papa, quien recibió la Cruz Jubilar de manos de una joven voluntaria, un gesto que subrayó la importancia de la participación de los fieles en este Año Santo.

El Papa león XIV recibe la cruz del Año Jubilar 2025 de manos de una joven en el Jubileo de la Santa Sede
La procesión avanzó por la Plaza de los Protomártires Romanos, cruzó el Arco de las Campanas y ascendió las escaleras del parvís de la Basílica Vaticana, donde el Papa León XIV realizó el paso solemne por la Puerta Santa.
Este acto, cargado de significado espiritual, representa la renovación de la fe y la apertura a la gracia divina, pilares fundamentales del Jubileo. La multitud acompañó el momento con cánticos y oraciones, mientras el Pontífice se detenía brevemente para meditar ante la Puerta Santa antes de cruzarla.
Una vez dentro de la Basílica de San Pedro, el Papa presidió la Santa Misa del Jubileo, coincidiendo con la memoria litúrgica de María, Madre de la Iglesia, una fiesta mariana que el Papa Francisco estableció que se celebrara en Lunes de Pentecostés.

El Papa León XIV en la misa del Jubileo de la Santa Sede, el Lunes de Pentecostés
En su homilía, León XIV profundizó en la relación entre la fecundidad espiritual de la Iglesia y el misterio de la cruz. "Toda la fecundidad de la Iglesia y de la Santa Sede depende de la cruz de Cristo", afirmó el Pontífice, destacando que la maternidad de María, al pie de la cruz, la convirtió en la nueva Eva, asociada a la redención de Cristo y fuente de vida para la humanidad.
El Papa instó a los miembros de la Curia Romana a redescubrir la santidad como clave para su servicio, recordando que la Iglesia es fecunda en la medida en que sus hijos viven su vocación con entrega y esperanza.
"La mejor manera de servir a la Santa Sede es procurar ser santos", enfatizó, subrayando que la fecundidad de la Iglesia se manifiesta en la vida concreta de cada creyente. "Un sacerdote que carga con una cruz pesada en su ministerio y que cada día realiza su labor con amor y fe, participa y contribuye a la fecundidad de la Iglesia", explicó el Papa, extendiendo esta reflexión a los padres de familia que enfrentan dificultades cotidianas con entrega y esperanza.

León XIV al empezar la misa en San Pedro del Vaticano del Jubileo de la Santa Sede 2025
El Jubileo busca ser no solo ha sido una celebración litúrgica, sino también un llamado a la unidad y a la renovación espiritual.
La jornada concluyó con el rezo del Regina Caeli, en el que el Papa León XIV elevó una plegaria por la paz en el mundo y la unidad de la Iglesia.