LifeTeen difunde su Informe de Jóvenes Católicos en PDF
5 heridas de los adolescentes de hoy y 5 estrategias de las parroquias

Chicas jóvenes y sonrientes, pero los adolescentes de la Generación Alfa tienen muchas heridas
LifeTeen España está difundiendo gratis en PDF un Informe sobre jóvenes católicos y pastoral juvenil en España. Este método de catequesis de adolescentes ha alcanzado ya a 1 millón de adolescentes, está presente en 30 países (incluyendo EEUU, Chile, México, Argentina, Perú...) y en España, donde LifeTeen está desde 2011, se aplica en 250 parroquias.
El Informe aborda algunas heridas que sufren los adolescentes de hoy y que los sociólogos españoles e internacionales consideran muy extendidas. También explica 5 formas de abordar pastoralmente estas edades en las parroquias... con sus resultados.

Informe sobre Jóvenes Católicos y pastoral juvenil de LifeTeen Spain 2025
Algunos datos son de Tezanos: no sirven
Por desgracia, los datos estadísticos sobre religiosidad de los jóvenes en España los toma del CIS del activista socialista José Félix Tezanos y carecen de toda credibilidad. Por ejemplo, citando al CIS de Tezanos, el informe repite que sólo un 28% de jóvenes españoles se declararían católicos.
La cifra de Tezanos es del todo increíble. Un repaso al CEO de la Generalitat de Cataluña de octubre de 2022, sólo sobre jóvenes en Cataluña, detectaba un 33% que se declaraban católicos. Es evidente que si en Cataluña, la más descristianizada de las comunidades autónomas, un 33% de jóvenes se declaran católicos (aunque sean poco o nada practicantes), la media en toda España será más alta.
Otro ejemplo se da en el Barómetro Andaluz de marzo de 2025, que en la franja de edad de 18 a 24 años detectaba un 27,6% que se declaraban "religiosos o muy religiosos", además de un 23,4% que se declaraban "algo religiosos" (sumando unos y otros, más de un 50% serían al menos "algo religiosos", y hablamos de la región más poblada de España). Los jóvenes andaluces que se declaraban "ateos o nada religiosos" eran un 31%.
Sí, la religiosidad entre los jóvenes en España es baja... pero desde luego no es creíble ese 28% que se declaran católicos como dice el CIS de Tezanos, y las cifras reales serán en torno al 40% o 45% (más que en Cataluña, pero menos que en Andalucía).
Decir que "la Generación Z tiene una capacidad de atención de 8 segundos, igual que un pez", citando un estudio norteamericano de Microsoft publicado en Time en 2015 tampoco es muy serio. Más serio es reconocer que "el 40% de los adolescentes y 70% de las adolescentes experimentaron síntomas de depresión en 2021"... pero era el año de salir de la pandemia de coronavirus.
No tiene sentido criticar a LifeTeen por no tener mejores datos de España. La crítica tendría que ir dirigida a las 10 universidades católicas de España que no invierten nada en sondeos sobre religiosidad y valores, y menos entre los jóvenes y adolescentes.

Un joven en adoración en el campamento de verano de LifeTeen 2025 en España
Soledad y heridas en época de móviles
Los datos sobre las heridas vitales y emocionales de los jóvenes actuales sí son relevantes, al combinar la experiencia sobre el terreno en España con los datos que maneja LifeTeen EEUU y los que declaran una y otra vez los estudios sobre soledad y depresión en España.
Primero recuerdan que la "Generación Z" (nacidos en 1995 y 2015) y la "Generación Alfa" (nacidos después de 2010) han crecido conectados permanentemente a Internet, y después al móvil y las tablets. Eso marca toda su relación con el mundo, su sensación de compañía... o de soledad.
El estudio apunta 5 problemas que afrontan muchos de estos jóvenes, más que en otras épocas.
1. Ansiedad
Lo dicen los estudios y en EEUU en los campamentos de LifeTeen lo dicen los documentos de los chavales: tienen que tomar sus medicamentos por la ansiedad. Puede ser por años de presión en redes sociales, por modelos ideales en redes que nadie puede alcanzar, por grupos que presionan, por ideologías (como la ideología de género, presiones de identidad de género), por política, por miedo al futuro, problemas económicos... lo viven con ansiedad diagnosticada.
La comunidad cristiana les puede ayudar dándoles comunidades estables de acogida y amistad, apoyo, y el mensaje de esperanza y confianza en Cristo.
2. Falta de pertenencia y comunidad
Ligado a lo anterior, buscan ser parte de un grupo, y la comunidad cristiana debería ofrecerles ese grupo, dejarles espacio para ser ellos mismos, con otros hermanos, y amarles, y que se sientan amados. La escuela no hace bien esto: 4 de cada 10 dicen que no se sienten implicados en ella.
3. Conexiones significativas
Esto se refiere a conectar con los demás de forma profunda, poder hablar de cosas serias, en profundidad. También significa poder conectar con Dios en profundidad. Para lo superficial, ya está Tik-Tok. La comunidad cristiana debe ofrecer esta conexión profunda, no superficial. Y hacerles sentir que son valiosos, que tienen un espacio valioso en la vida.

Unos jóvenes se confiesan con sacerdotes en el campamento de verano de LifeTeen, al aire libre
4. Necesidad de familia
Con tantas familias rotas, de semi-padres y semi-hermanos, con todas sus heridas e incertezas, la comunidad cristiana debe poder ofrecer mentores, catequistas adultos cercanos, accesibles, imitables o admirables, o al menos disponibles, para poder ser modelos para el adolescente, como hermanos mayores o primos de confianza.
5. Navegando la soledad
El tiempo que un joven hoy pasa con sus amigos presencialmente, en persona, es un tercio del que pasaba en el año 2000. Les cuesta muchísimo juntarse, pasar tiempo juntos. Y, por naturaleza, lo necesitan. Lo intentan sustituir con conexiones online, pero no es lo mismo en absoluto, son conexiones superficiales.
La comunidad cristiana insiste en sacar a los adolescentes de sus cuartos y pantallas y llevarlos a relaciones personales reales, entre ellos, con amigos mayores, catequistas y con Dios.

Catequistas de LifeTeen reciben con entusiasmo y alegría a los chavales que acuden al campamento de verano de 2024 en España
Lo que hacen las parroquias
LifeTeen señala que según el informe “Jóvenes y Religión en España” (Fundación SM, 2021) y los estudios de la Conferencia Episcopal Española (CEE), hay dos momentos críticos en la trayectoria de fe de los jóvenes españoles:
1. Después de la Confirmación (3-4 ESO), durante la educación secundaria;
2. Al dejar la educación secundaria y pasar a la universidad o Formación Profesional.
Las parroquias en España pueden intentar trabajar con sus adolescentes de 5 formas distintas, y, según constata LifeTeen, algunas funcionan bastante mal.
1. Modelo "no hacemos nada"
Son las parroquias que ni intentan ofrecer nada a los adolescentes. Se lo dejan al colegio, a los padres y esperan que los chicos, simplemente, vengan a misa y hagan lo mismo que un adulto. A veces, esperan que la Confirmación mágicamente convierta al adolescente en una especie de adulto. La realidad es que en este formato, casi todos los adolescentes católicos, después de cumplir con "el rito" de confirmarse, desaparecen para siempre de la vida católica.
LifeTeen lo dice claro: "No tener ningún programa de pastoral juvenil es una ruta directa hacia la desconexión de los adolescentes y jóvenes, y a la disminución del número de feligreses".
2. Modelo "llanero solitario"
La parroquia cuenta con una persona, prácticamente sola, para llevar la pastoral juvenil. Si esta persona se quema, envejece, enferma, o se va, o el párroco la cambia, se desmantela todo. "Esto lleva a programas insostenibles y de corta duración".
3. Modelo "usemos mucho Internet"
Es el modelo digital, que se usa más en EEUU que en España. Quizá tiene más sentido en países isleños, o con católicos muy aislados. Consiste en enviar al adolescente muchos vídeos, apps, YouTube, materiales en plataformas.... Puede transmitir contenidos bastante bien, si están bien hechos, pero "no logra ofrecer una verdadera conexión ni relaciones significativas". Es importante para un adolescente poder hacer preguntas profundamente personales, para explorar juntos su fe e identidad católica, y este modelo no lo favorece.
4. Grupos pequeños... y sólo eso
Hay parroquias que hacen grupos de tan solo 4 o 5 adolescentes que se reúnen entre sí (o con el catequista). Incluso si el grupo funcionara bien, y perseveraran juntos, ¡no sería tan atractivo como para invitar a sus amigos! Más aún, la estructura lo desincentiva. Lo más fácil es que uno o dos empiecen a fallar por cualquier cosa y el frágil grupito se desmantela para siempre.

Catequistas jóvenes de LifeTeen en un encuentro de alabanza en su campamento de verano de 2024
5. Lo mejor: formar grupos grandes con varios mentores adultos
Este es el modelo que utiliza LifeTeen en 30 países. Los catequistas adultos son un equipo, dinámico, amigable. Si falla un catequista un día, no pasa nada: son varios. Hay momentos en que todos los adolescentes van "en mogollón", y otros en los que se separan en grupos pequeños. Pueden hablar entre ellos y con su mentor. Es divertido, hay "ambiente" y los adolescentes invitan a sus amigos alejados. Una parroquia puede terminar el curso con más chavales que al empezar.
LifeTeen España tiene programas y formatos para parroquias grandes y pequeñas, rurales y urbanas. Pero a todas les dice lo mismo: hay que amar a los adolescentes, ir a por ellos, querer servirles y acercarlos a Cristo.