El matrimonio cristiano (y también el matrimonio natural, entre no bautizados) implica exclusividad sexual, lo que se protege también con exclusividad emocional. La intimidad sexual y emocional debe estar limitada al trato entre los dos cónyuges, exclusivamente. Cualquiera que se case reservándose el derecho a mantener relaciones sexuales con terceras personas está en matrimonio nulo, es decir, no se está casando en realidad. Quien se casa renuncia a buscar la intimidad sexual en otras personas que no sean su cónyuge. 

En la web All Pro Dad, especializada en consejos de familia para hombres, se plantea (aquí, en inglés) el caso de un marido que cuenta a un amigo que ha empezado una relación a escondidas con otra mujer. ¿Qué debe hacer en estos casos una persona que cree en el matrimonio y la familia? 

"Es difícil saber como responder exactamente, pero lo peor sería no hacer nada", plantea el director de contenidos de All Prod Dad, BJ Foster. "Como amigos, especialmente si hemos sido testigos cuando se casaron, es nuestra responsabilidad hacer todo lo que esté en nuestro poder para reforzar sus votos esponsales y animarle a ellos. Si tienes amigos que engañan a su esposa con otra mujer, esto es lo que hay que hacer". 


Antes de decirle nada a nuestro amigo que nos ha confesado que engaña a su mujer, hemos de hacerle hablar más. Que nos cuente más cosas. "Hazle preguntas con delicadeza que le ayuden a revelar cómo llegó a esa situación. Averigua más sobre su matrimonio. Necesita un amigo que camine con él". Antes de darle ningún consejo, hay que escucharle, reunir muchos más datos, obligarle a que, hablando, verbalice su situación. 


Nuestro amigo intentará justificarse de mil maneras, algunas muy extrañas. Intentará mostrar que lo que hace no es tan grave, o que es ya inevitable, o que era natural o hermoso, o que las alternativas son peores. Nuestra función como amigos es ayudarle a confrontar la realidad y no dejar que se crea sus justificaciones ni minimice la gravedad y el daño de la situación. 

"Es importante ser persistentes y firmes en esto, quizá incluso confrontarnos. Sea un asunto emocional o haya pasado a nivel físico, es una traición a su esposa, a sus hijos e incluso a su comunidad. Tu tarea como amigo no es condenar, pero sí presentar una imagen nítidad de la realidad de lo que se ha hecho".


"Necesita cambiar de rumbo y eso empieza cortando la relación, es decir, dejar de tener contacto con la otra persona. No basta con detener el affaire", es decir, el trato sexual/emocional. Si ella es una compañera de trabajo puede ser más complicado romper todo contacto, pero vale la pena, incluso que él cambie de trabajo y de ambiente.

¿Y si nuestro amigo se niega a detener su relación adúltera? BJ Foster recomienda en esta fase invitar a algún otro amigo común, o a alguien que él admire y que crea en su matrimonio, para animarle a dejar esa relación y luchar por su matrimonio. 




"Todo será increiblemente doloroso tras la confesión", advierte BJ Foster. Ir a terapia de pareja, con un buen terapeuta familiar que crea en el matrimonio (y no en destruirlo) será de ayuda para ambos y beneficiará a toda la familia. "Si ella se niega a ir, él debería acudir por su cuenta, a hablar de su quebranto con alguien sensato. Necesita empezar a trabajar para reconstruir la confianza. Es posible sobrevivir y reconstruir un matrimonio tras una infidelidad. Sin embargo, requiere esfuerzo, fidelidad, compromiso, humildad, apertura y un deseo de ambos esposos de olvidar. Los amigos seguiremos animando a ambos esposos a luchar por su matrimonio y el uno por el otro".