Santa Trifina de Bretaña, cefalófora y eremita. 29 de enero; 21 de julio, en Bretaña, y 8 de noviembre.
 

Fue hija de Guerech de Vannes, hijo de Santa Pompeia o Alma (26 de julio). Desde niña Trifina quería consagrarse a Cristo, y era animada a ello por San Gildas (29 de enero), pero apenas llegó a la edad casadera, su padre la prometió a Conomor, Duque de Cornwall, el cual era conocido por su vida libertina y sus muchas mujeres, a las que abandonaba cuando se cansaba de ellas, hallaba alguna nueva, o se quedaban embarazadas. Trifina se negó a casarse con él, implorando a su padre que no la convirtiera en una concubina de aquel hombre. San Gildas intervino, pero nada pudo hacer, y la joven fue entregada a Conomor. 

Todo fue bien hasta que Trifina quedó embarazada. Al saberlo Conomor, sin mediar palabra tomó una espada y decapitó a la muchacha. Gildas, que estaba en oración, fue al lugar del hecho e invocando a Dios, lanzó un puñado de tierra contra el castillo de Conomor, que se derrumbó al instante, quedando este mal herido. Luego Gildas tomó la cabeza de Trifina, la puso sobre sus hombros, la bendijo y ella volvió a la vida (!), quedándole para siempre la cicatriz en el cuello. Trifina quiso irse con Gildas a su monasterio de Rhuys, pero este no la aceptó, recomendándole que volviera a casa de sus padres y cuidara a su hijo. Ella lo hizo y dio a luz a San Tremeur (21 de julio). Cuando era aún pequeño, Trifina lo llevó al monasterio de Gildas, y ella misma ingresó en un monasterio de monjas, donde vivió piadosamente. 

Es representada también con su cabeza en las manos, como los Santos Cefalóforos, aunque fuera revivida y finalmente muriera de otra cosa.


Fuentes:
-"Dix mille saints: dictionnaire hagiographique". A. SIGIER. 1991.
-"Les vies de tous les Saints de France". Tomo V. M. CH. BARTHELEMY. Versalles 1864.

A 29 de enero además se celebra a
Beata Arcángela Guirlani, virgen carmelita.
Santa Radegundis, reclusa premonstratense.