La Renovación Carismática vuelve a evangelizar las playas: «La gente está muy necesitada de Dios»

Desde el comienzo del verano, la Renovación Carismática Católica anunció multitud de fechas y emplazamientos en los que, un año más, llevaría el Evangelio a las calles. Concretamente, a las playas. Ya lo han hecho, por ejemplo, en las playas de Murcia desde el mes de julio, y desde este 18 de agosto, vuelven a hacerlo en las playas de la diócesis de Cartagena.

Como en veranos anteriores, lo hacen siguiendo el formato Una luz en la noche, en el que los participantes, de dos en dos, conversan con los viandantes para anunciarles a un Cristo vivo invitándoles a entrar a la iglesia que, en la zona, permanece abierta esa noche con el Santísimo expuesto.

Las jornadas evangelizadoras aún se celebran con intensidad. En el caso de Cartagena, comenzaron el viernes 18 de julio en la Parroquia Santiago Apóstol de Santiago de la Ribera (San Javier). A esta le siguió la del viernes 25 en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Los Urrutias (Cartagena), el 8 de agosto en la playa de Villananitos y en Lo Pagán (San Pedro del Pinatar), en la capilla de Nuestra Señora de la Asunción; y continúan hasta el próximo 29 de agosto, que tendrá lugar en la ermita de Nuestra Señora de la Asunción de Bahía, en Puerto de Mazarrón, donde los evangelizadores están convocados a las 21:00 horas.

Cada una de estas evangelizaciones comienza con la celebración de la Eucaristía, seguida de una alabanza y de un rato de adoración eucarística para, después de un envío, salir a evangelizar en el paseo marítimo y calles cercanas al templo.

«La gente está muy necesitada de Dios»

Uno de los participantes en esta actividad es Ángel Jiménez, de la pedanía murciana de Churra, que pertenece al ministerio de evangelización de la Renovación Carismática Católica de la Diócesis de Cartagena.

Cuenta al portal de la diócesis que esta actividad se viene desarrollando durante los últimos cuatro años en las playas, “donde la gente ha dejado un poco el estrés y puede tener otra apertura”, para anunciar allí “el reino de Dios, la salvación de Jesús y el amor tan grande que Dios nos tiene”.

Una tarea en la que participa pensando en aquellas personas que recibirán este anuncio como novedad. “Si yo estuviera en su lugar, a mí me gustaría que alguien me dijera que hay otra manera de vivir”.

Paco Gálvez, de Alcantarilla, también aprovecha su tiempo de vacaciones para colaborar en esta actividad evangelizadora, donde ha visto cómo muchos, al escuchar el kerigma o al entrar ese día en la iglesia se conmueven, lloran o deciden retomar su vida de fe.

“La gente está muy necesitada de Dios; yo simplemente quiero, en mi pequeñez, dar lo que he recibido: decir a las personas que Dios las quiere y las ama, y anunciar a Jesucristo, que es el que me ha cambiado la vida”, confiesa.

Para participar en cualquiera de estas evangelizaciones, tan solo hay que presentarse en la parroquia o ermita donde vaya a realizarse en el día y horario indicados, disponibles para su consulta también en el cartel de la actividad.