Durante una de las sesiones de formación por Skype.
En marzo de 2012 comenzaron a tener de modo periódico las sesiones de formación ofrecidas por parte de sacerdotes que trabajan en Polonia, Irlanda y Estados Unidos. Y aunque no es una bilocación, los esfuerzos por medio de Skype están dando formación a jóvenes matrimonios australianos. Ciertamente la fe y la espiritualidad son temas importantes en esas sesiones, pero no son los únicos. Han sido invitados oradores de diversas realidades culturales para que el público pueda sentirse motivado a usar su talento para el arte y la cultura, así como para el crecimiento espiritual y para fomentar la evangelización.
«Podríamos decir que es una reminiscencia de las primeras comunidades cristianas», dice Andrew. «Y aunque san Pedro y san Pablo no tenían la tecnología que tenemos hoy en día, puede recrearse la misma intimidad para maximizar los efectos que el Espíritu Santo quiera realizar a través de nosotros, sus instrumentos».
En el Mensaje para la Jornada Mundial para las Comunicaciones Sociales 2013 Benedicto XVI recordaba que «muchas personas están descubriendo, precisamente gracias a un contacto que comenzó en la red, la importancia del encuentro directo, de la experiencia de comunidad o también de peregrinación, elementos importantes en el camino de fe». Como se puede notar, con un poco de ingenio, Skypetambién brinda estas posibilidades.