Durante su visita a Portugal, el Papa se aloja en la Nunciatura, y allí recibe a distintos grupos pequeños de personas fuera del programa público oficial.

Con los peregrinos ucranianos

En la mañana del jueves ha recibido durante media hora a 15 jóvenes peregrinos ucranianos, de los 500 que han llegado a la JMJ con ayudas económicas del Vaticano. Con ellos estaba Denys Kolada, consejero del presidente ucraniano Volodímir Zelenski para cuestiones religiosas. Es un encuentro del que se había hablado, pero que no figuraba en la agenda oficial.

"Al concluir el encuentro, el Papa y los jóvenes han rezado juntos un Padrenuestro, pensando en la maltratada Ucrania", dice el comunicado vaticano.

La web de la Iglesia Grecocatólica Ucraniana, en comunión con Roma, da más datos del encuentro. Había jóvenes de rito griego y de rito latino y les acompañaba el padre Roman Demush, responsable de juventud de la Iglesia grecocatólica.

El Papa pidió perdón a los jóvenes por no conseguir influir más para mejorar en la situación en Ucrania.

Los jóvenes católicos entregaron al Papa regalos simbólicos de lo que sufre el país: pan y agua, por el uso del trigo y la destrucción de presas en la guerra, y llamando la atención sobre los bombardeos rusos contra silos de grano en los puertos.

La señora Iryna Bilska entregó al Papa fragmentos de cohetes que cayeron en el patio de la iglesia en Boryslav, en la región de Jersón, y explicó que el templo fue refugio para miles de desplazados.

Según el Padre Demush, el encuentro fue emotivo y "el Papa escuchó con atención y miró, enjugando las lágrimas de los jóvenes ucranianos que venían a contarle la verdad sobre la guerra". El Papa habló poco y aseguró sus oraciones por Ucrania.

A la JMJ han acudido también 18 peregrinos rusos, y tanto rusos como ucranianos han sido parte de los 140.000 jóvenes que pasaron ya por el santuario de Fátima, ligado espiritualmente a la conversión de Rusia por las apariciones de la Virgen de 1917. No se ha anunciado un encuentro con jóvenes rusos. Algunos esperan algún tipo de gesto con rusos y ucranianos, quizá en el Via Crucis de la JMJ.

Encuentro con víctimas de abusos sexuales

En la misma noche del 2 de agosto, el mismo día que llegó a Lisboa, el Papa recibió en Nunciatura a 13 víctimas de abusos sexuales en ámbitos eclesiales, según confirmaron fuentes vaticanas. Acompañaron a las víctimas "representantes de instituciones de la Iglesia portuguesa, responsables de la protección de los menores". Según la Sala de Prensa de la Santa Sede “el encuentro se desarrolló en un ambiente de intensa escucha y duró más de una hora, concluyendo poco después de las 20.15 horas”.

Una nota de los obispos portugueses señaló que ese encuentro confirma "el camino de reconciliación que la Iglesia en Portugal viene recorriendo en este ámbito, poniendo a las víctimas en primer lugar, colaborando en su reparación y recuperación". Entre los que participaron estaban: Rute Agulhas, coordinadora del Grupo VITA; Paula Margarido, presidenta del Equipo Nacional de Coordinación de las Comisiones Diocesanas y Pedro Strecht, coordinador de la Comisión Independiente que elaboró el informe sobre abusos en entornos de Iglesia católica en el país.

Precisamente, en su encuentro en los Jerónimos con obispos y sacerdotes, el Papa pidió "una purificación humilde y constante, partiendo del grito de dolor de las víctimas, que siempre han de ser acogidas y escuchada".

En realidad, el informe "Dar voz ao silencio" sobre abusos en Portugal, presenta numerosas incógnitas. Aunque los titulares de prensa hablaban de "más de 4.800 menores que sufrieron abusos sexuales desde 1950", se trata de una extrapolación o cálculo, porque los investigadores explican que solo encontraron cara a cara a 34 personas, y otros 500 casos declararon ser víctimas en formularios anónimos inverificables. (Lea aquí el análisis de ReL sobre este informe de 500 páginas).

Con los afectados por el terremoto de Turquía y Siria

El Papa en el jueves también se reunió con 40 jóvenes llegados de Turquía, de regiones afectadas por el terrible terremoto de febrero. Muchos de ellos eran católicos de ritos orientales o cristianos ortodoxos o siríacos. 

“Los jóvenes agradecieron al Papa la ayuda recibida tras el terremoto. El Papa Francisco expresó su cercanía al sufrimiento vivido por quienes sufrieron la devastación provocada por el terremoto”, indica una nota enviada por la sala de prensa de la Santa Sede a los periodistas.

El encuentro, el tercero del día en la Nunciatura, duró cerca de media hora y finalizó con el rezo del Padre Nuestro y felicitaron a una joven turca, que cumplía 23 años

Según la confederación internacional de Caritas, “44.200 personas perdieron la vida y otras 108.300 resultaron heridas” en los terremotos de febrero.  Las autoridades turcas informaron que alrededor de 164.300 edificios se derrumbaron o sufrieron graves daños en 11 provincias del país. En Siria hubo también muchos daños, más difíciles de cuantificar.