(ReL) El seminario, que se traslada a Roma, tendrá como rector al obispo emérito de Oita, monseñor Takaaki Hirayama. Además, se conservará el edificio del actual seminario en Japón. La decisión papal es un claro apoyo al Camino Neocatecumenal, sobre todo dado el hecho de que la Conferencia Episcopal de Japón envió en mayor pasado una delegación de cuatro obispos a Roma para exponer al Papa Benedicto XVI "el serio problema" que estaban teniendo con el Camino y su seminario en la diócesis de Takamatsu. Los cuatro prelados mostraron su deseo de que el Papa les entendiera e interviniera para ayudar a resolver la situación. Era la tercera vez en cinco meses que los obispos japoneses iba a Roma por este asunto: "No nos gusta venir tan a menudo pero tenemos que hacerlo dada la seriedad de la naturaleza del problema que tiene que ser resuelto", dijo monseñor Okada, presidente de la conferencia episcopal japonesa y arzobispo de Tokyo. Al dar la condición de Pontificio a dicho seminario, el mismo pasa a depender directamente de Roma, aunque el mismo seguirá recibiendo a los seminaristas neocatecumenales, tal y como el resto de seminarios Redemptoris Mater.