El Papa Francisco este jueves ha predicado en la misa matinal de Santa Marta a partir de la lectura de Hechos de los Apóstoles: después de ser asesinado San Esteban, los cristianos huyen de Jerusalén... y así la fe se extendió por muchos lugares. Además, el Espíritu Santo da instrucciones muy concretas al discípulo Felipe, que se levanta y pone en marcha.

De esa experiencia el Papa destacó varias enseñanzas: hay que levantarse y actuar desde cerca, no existe la "evangelización desde el sillón" (en italiano dijo "desde la poltrona"). 

El Papa recordó que todos los cristianos tienen “la obligación” y la “misión” de evangelizar, siendo “oyentes del Espíritu” para “estar en salida” y demostrar “cercanía a la gente”.

Para hacerlo, dijo, hay que partir “no de las teorías, sino de las situaciones concretas”.

Así, en la lectura del día se pide a discípulo Felipe que “se levante” y vaya a evangelizar.

Señaló que después del martirio de Esteban “se desató una gran persecución” para los cristianos y “los discípulos se dispersaron un poco por todas partes”. Pero en ese “viento de persecución” fueron empujados a ir “más allá”.


“Como hace el viento con las semillas de las plantas, allí lleva otras y siembra, así ocurrió aquí: fueron más allá, con la semilla de la Palabra, y han sembrado la Palabra de Dios”.

“Y así podemos decir, un poco bromeando, que ha nacido la ‘propaganda fidei’. Así. De una persecución, de un viento, llevaron la evangelización a los discípulos. Y este paso que hoy hemos leído, de los Hechos de los Apóstoles, es de una belleza enorme. Pero es un verdadero tratado de evangelización. Así evangeliza el Señor. Así anuncia el Señor. Así quiere el Señor que evangelicemos”.

Francisco subrayó 3 palbras que le parecen clave, que describen cómo el Espíritu habla a Felipe (y a cualquier evangelizador):

- “levántate”, 
- “acércate” 

- y “parte de la situación”.

El Papa dijo que “no existe una evangelización del sillón”.

Puso el ejemplo de muchos misioneros muriendo por enfermedades extrañas en tierras lejanas. “No están preparados físicamente, porque no tenían los anticuerpos para resistir a las enfermedades de esas tierras” y morían incluso “martirizados”. Son “mártires de la evangelización”.

En su opinión, no existe ningún “vademécum de la evangelización”. Se necesita “cercanía” para “observar qué es lo que sucede” y partir “de la situación, no de una teoría”.


“No se puede evangelizar en teoría. La evangelización es un poco cuerpo a cuerpo, persona a persona. Se parte de la situación, no de las teorías. Y anuncia a Jesucristo y el coraje del Espíritu Santo que lo empuja a bautizarlo. Va más allá, va, hasta que siente que se ha terminado su obra”.

“Así hace la evangelización. Estas 3 palabras son clave para todos nosotros los cristianos, que debemos evangelizar con nuestra vida, con nuestro ejemplo, y también con nuestra palabra”.


“Es un método sencillo, pero es el método de Jesús. Jesús evangelizaba así. Siempre en camino, siempre en el camino, siempre cerca de la gente, siempre partir de las situaciones concretas, de la concreción. Evangelizar solo se puede con estas 3 actitudes, pero bajo la fuerza del Espíritu Santo. Sin el Espíritu ni siquiera estas actitudes sirven. Es el Espíritu que nos lleva a levantarnos, acercarnos, y a partir de las situaciones”.