Los jóvenes de Portugal y España son más afectados por una nueva decisión forzada por la crisis del coronavirus: la Jornada Mundial de la Juventud prevista para verano de 2022 se aplazará a 2023. Los chicos que hoy tienen 15 años podrán acudir como adultos jóvenes con 18. Será, sin duda, una de las mayores experiencias de juventud cristiana en la era post-coronavirus.

También se aplaza un año el Encuentro Mundial de las Familias que se iba a realizar en Roma en 2021. 

Estas decisiones fueron difundidas este lunes 20 de abril por el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.

“A causa de la actual situación sanitaria y de sus consecuencias sobre el desplazamiento y la aglomeración de jóvenes y familias, el Santo Padre, junto al Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, ha considerado posponer por un año el próximo Encuentro Mundial de las Familias, programado en Roma para junio de 2021; y la próxima Jornada Mundial de la Juventud, programada en Lisboa en agosto de 2022, respectivamente a junio de 2022 y agosto de 2023”. 

El Papa tendría entonces 85 años en el EMF de Roma y 86 años en la JMJ de Lisboa. 

Tras el anuncio del Vaticano, el Patriarcado de Lisboa informó que el Comité Organizador Local (COL) acoge esta decisión “con naturalidad y confianza, compartiendo con el Santo Padre la llamada de que, en el contexto actual y en el futuro cercano, el foco de atención de todos estará en el cuidado de los más vulnerables, familias y todos aquellos que, por las razones más diversas, sufren los efectos de la pandemia causada por COVID-19”.

“El COL y los equipos de trabajo ya establecidos están entusiasmados con la posibilidad de preparar la JMJ en Portugal de la mejor manera, con la certeza de que el evento traerá la esperanza y la alegría de los jóvenes de todo el mundo a la capital portuguesa”, afirmó.