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Doctrina de la Fe: los escritos de María Valtorta «no pueden considerarse de origen sobrenatural»

El origen sobrenatural de las obras de María Valtorta ha sido reiteradamente rechazado por la Santa Sede.

Publicado por
C.L.

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La Santa Sede difundió esta semana un comunicado del Dicasterio para la Doctrina de la Fe en el que responde a las "peticiones de aclaración" que recibe "con frecuencia, tanto de eclesiásticos como de laicos", sobre la posición de la Iglesia con respecto a los escritos de María Valtorta, como la obra El poema del Hombre Dios, hoy conocida con el título El Evangelio como me ha sido revelado, y otras publicaciones.

"En este sentido", dice el dicasterio dirigido por el cardenal Víctor Manuel Fernández, "reiteramos que las supuestas 'visiones', 'revelaciones' y 'comunicaciones' contenidas en los escritos de María Valtorta, o en cualquier caso atribuidas a ellos, no pueden considerarse de origen sobrenatural, sino que deben considerarse simplemente formas literarias de las que la autora se ha servido para narrar, a su manera, la vida de Jesucristo".

Además, la nota añade que "en su larga tradición, la Iglesia no acepta como normativos ni los Evangelios apócrifos ni otros textos similares, ya que no les reconoce la inspiración divina, remitiendo a la lectura segura de los Evangelios inspirados".

¿Una obra escrita "al dictado"?

María Valtorta (1897-1961) fue una laica italiana que durante la Primera Guerra Mundial colaboró como enfermera en los hospitales de guerra y contrajo gravemente la denominada "gripe española", que se difundió en aquellos años por Europa. En 1923 decidió ofrecer su vida a Dios, y en 1925 lo hizo como "víctima", según el modelo de Santa Teresita de Lisieux, ofrenda que reiteraba cotidianamente.

A partir de 1934, por causa de numerosos sufrimientos físicos y espirituales, incluida la parálisis de las piernas, quedó confinada en su cama hasta su muerte. Era miembro de la Orden Tercera de los Siervos de María y a la vez, con permiso de la autoridad eclesiástica, terciaria franciscana.

Por petición de su padre espiritual, Romualdo Migliorini, entre 1943 y 1951 escribió sus memorias en más de un centenar de cuadernos, más de quince mil páginas que se han publicado en 16 volúmenes.

María Valtorta presenta sus escritos como dictados, unos por su ángel custodio (Azarías), otros por el mismo Jesús, la Virgen María o el Espíritu Santo.

Juicios anteriores de la Iglesia

Estos textos fueron presentados a Pío XII, que según los religiosos que se los llevaron habría autorizado verbalmente su publicación, que se hizo sin permiso alegando esa supuesta autorización. En 1959, el Santo Oficio -antiguo nombre de Doctrina de la Fe- los incluyó en el Índice de Libros Prohibidos. Aunque este Índice fue suprimido por Pablo VI, la Santa Sede recordó la vigencia de su valor moral como juicio emitido por la Iglesia.

El 31 de enero de 1985, el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, escribió una carta al cardenal Giuseppe Siri, arzobispo de Génova, para dar respuesta a una consulta de un sacerdote de la diócesis. En esta carta, cuyo juicio fue reiterado por el futuro Benedicto XVI en 1993, se decía que "la obra en cuestión fue incluida en el Índice el 16 de diciembre de 1959 y fue definida por L’Osservatore Romano del 6 de enero de 1960 como 'una vida de Jesús mal novelada'. Las disposiciones del decreto fueron republicadas con una nota explicativa también en L’Osservatore Romano el 1 de diciembre de 1961. (...) No se considera oportuna la difusión y recomendación de una obra cuya condena no fue decidida a la ligera, sino después de motivaciones ponderadas con el fin de neutralizar los daños que tal publicación puede causar a los fieles menos preparados".

El comunicado de Doctrina de la Fe viene, pues, a confirmar un juicio sostenido por la Santa Sede sobre dichos escritos.