Joe Wilson, ¿el nuevo Acutis?: su aspiración cristiana era «ser un don nadie», murió con 17 años

El italiano Carlo Acutis, a día de hoy, es el único santo católico de la generación llamada millennials que ha subido a los altares. Aunque, eso podría cambiar pronto, si el joven escocés Joe Wilson, nacido en 1994 y muerto a los 17 años, es canonizado.

Wilson nació en Carfin (Escocia) y falleció en 2011, a los ocho días de su cumpleaños, de forma inesperada y por una enfermedad cardiaca no diagnosticada.

Así era Joe Wilson

Su causa de beatificación acaba de recibir, de los obispos de Escocia, el visto bueno oficial para que continúe adelante. The Times se hizo eco así de la noticia: «¿Podría el adolescente Joe Wilson ser el primer santo escocés del milenio?».

El joven Joe vivió de niño muy cerca de la Gruta de Carfin, santuario dedicado a Nuestra Señora de Lourdes y Santa Bernadette. Para él, este lugar se convirtió en un pilar de su vida espiritual. 

Lo visitaba con frecuencia, acompañado de su familia o en soledad, y lo consideraba un lugar muy especial. Allí dedicaba muchas oraciones por los demás y se inspiraba en el testimonio de Santa Teresa de Lisieux, guía y modelo para él.

"He estado pensando en algunas maneras de mejorar mi vida cristiana", escribió el 6 de febrero de 2011. "Como cristiano, es bueno hacerse un don nadie. Rodéate de quienes son ignorados, excluidos o callados, y consuélalos con ternura. Esto puede ser muy difícil, ya que daña tu imagen, pero es una excelente manera de proclamar la buena nueva". 

Dos años antes ya había anotado: "Nunca creas que eres mejor que nuestro prójimo, porque Dios ha trazado un camino para cada uno en la vida y no eres tú quien debe juzgarlo".

El 14 de septiembre de 2010, Joe escribía: "El Papa Benedicto XVI viene a Glasgow el jueves y voy a verlo. ¡Qué ganas! Estaremos en la zona 1, justo frente al altar. Será una ocasión espiritual maravillosa y traerá mucha alegría a Escocia". 

Al día siguiente, añadía: "Estoy entusiasmado con la visita del Papa Benedicto XVI a Bellahouston Park mañana. Recé el Rosario el domingo para que todo salga bien y haya muchas conversiones. ¡Estará Jesús en el altar!".

Tras su fallecimiento, se descubrieron sus diarios, redactados con una profundidad espiritual sorprendente para un adolescente. En ellos volcaba pensamientos como: "Sé que el mundo no será perfecto y por eso me encanta tener fe. Piensa en toda la gente que se muere de hambre, en guerras, en hambrunas… Todas estas personas desafortunadas en la Tierra están, estoy seguro, sentados en los tronos más altos del Cielo".

Joe tenía una forma especial de hacer que todos se sintieran importantes, valorados y especiales. Siempre optimista y positivo, su cálida energía era contagiosa y muchos la comentaban. Encontraba maneras de conectarse con personas de todas las religiones y culturas. 

Joe estudió en la escuela Our Lady and St Francis y en el Taylor High School. Fueron sus profesores y compañeros quienes, tras su muerte, destacaron la santidad de su vida. El colegio, situado en New Stevenston (Lanarkshire), tiene un marcado ideario católico que influyó en su formación.

En diciembre de 2011, una cardiopatía repentina lo llevó al coma. Cientos de personas se reunieron en la Gruta de Carfin para rezar por él en una procesión con velas. "Joe era alguien que siempre hacía lo posible por ayudar a los demás y hacer que todos se sintieran valorados", recuerdan quienes participaron.

Hoy, junto al santuario de Nuestra Señora de Lourdes y Santa Bernadette, existe una placa en su memoria. Cada año miles de personas se congregan allí para rezar. La familia incluso donó fragmentos de sus diarios para que los visitantes pudieran llevarse a casa parte de sus reflexiones espirituales.

Actualmente, la causa de Joe Wilson continúa en Roma, en la llamada fase romana. No existen plazos definidos: podría ser elevado a los altares en poco tiempo o pasar décadas sin avances. Todo dependerá de que se reconozcan sus virtudes heroicas y de que se produzca un milagro atribuido a su intercesión.