Mario de las Heras («El Debate»): «Los valores cristianos se encuentran en el tuétano de Occidente»
Mario de las Heras está a la cabeza de la delegación de 'El Debate' en Castilla-La Mancha.
El 11 de marzo se inauguró en Toledo la delegación de El Debate en Castilla-La Mancha, que se suma a las ya existentes en Madrid, Comunidad Valenciana, Cataluña, Galicia y Andalucía en un acto en el que estuvieron presentes el presidente de la Junta de Comunidades, Emiliano García-Page, y el presidente de la Asociación Católica de Propagandistas, Alfonso Bullón de Mendoza, y el director del diario, Bieito Rubido.
Al frente de la delegación castellano-manchega se encuentra Mario de las Heras, periodista de El Debate que atesora además una larga experiencia en distintos medios de información deportiva y cultural. Le hemos preguntado por las aspiraciones y características del proyecto que encabeza.
-La inauguración de la delegación de "El Debate" en Castilla-La Mancha subraya valores como la pluralidad y el compromiso con la verdad. ¿Cómo planea este medio promover estos valores en el contexto de una sociedad que enfrenta retos como la polarización ideológica y el relativismo moral?
-Pues siendo fieles a esos mismos valores sin perder de vista la polarización ideológica, el relativismo moral y cualesquiera otros enemigos de esos mismos valores. El dicho popular reza “No hay mayor desprecio que no hacer aprecio”. Pues bueno, El Debate hace aprecio de todo y no desprecia nada. Simplemente sigue su camino, un itinerario muy claro desde el principio, pero siempre muy atento a todo para, como es lógico, actuar en consecuencia.
-Toledo, considerada el corazón de España, tiene una rica historia religiosa y cultural. Desde su perspectiva, ¿cómo puede la delegación de Castilla-La Mancha contribuir a destacar este legado católico y su relevancia en la España contemporánea?
-Toledo lo pone todo muy fácil en el sentido al que usted se refiere. Solo hay que fijarse. Hay que mirar. Ver y contarlo. Eso es el periodismo. Toledo lo hace fácil y bonito porque todo es antiguo y bello. Todo es historia. También presente. Ambos saltan la vista y solo se trata de atraparlos. No es tarea sencilla. Nada es sencillo, pero simplemente el contexto en el que nos movemos nos señala claramente la antigüedad y la modernidad unidas en gran medida por el catolicismo.
-"El Debate" ha enfatizado la importancia de la coexistencia pacífica, el respeto y la tolerancia democrática. ¿Qué papel considera que tienen los medios de comunicación en fomentar estos principios desde una perspectiva que respete los valores cristianos y la identidad cultural de la región?
-Pues una importancia monumental, ya que estamos en Toledo. Se habla mucho de conceptos como solidaridad o diversidad, por ejemplo. Sin ninguna intención de menospreciar este tipo de ideas, en los valores cristianos se encuentra precisamente todo este tipo de ideas. Esos nuevos conceptos son otro nombre de lo mismo, o parecido, y con otra intención. Una intención muchas veces tergiversadora, incluso perversa, de los principios religiosos que impregnan en Europa a lo no religioso se quiera o no. La cultura europea está hecha con los mimbres religiosos, cristianos, se sostiene en sus pilares milenarios. Los valores cristianos van mucho más allá de la fe de cada uno. Se encuentran en el tuétano de Occidente que se está intentando extirpar de mala manera en demasiados casos. Así que, como decía, los medios tienen el papel monumental de conservar con palabras esos valores igual que ha de conservarse físicamente el patrimonio toledano, conquense, ciudadrealeño, guadalajareño o albaceteño.
-En un contexto en el que muchos medios buscan únicamente el sensacionalismo, "El Debate" se posiciona como un medio comprometido con la responsabilidad social. ¿Qué estrategias se adoptarán para garantizar que las noticias sobre Castilla-La Mancha no solo informen, sino que también formen y eduquen a los lectores sobre la verdad y la justicia?
-La estrategia, si es que se le puede llamar así, es, como le decía hace un momento, seguir nuestro camino en la verdad y en la justicia a la que usted se refiere de los hechos. Formar y educar quizá pueda ser excesivo, pero sí hay una parte de eso. En la lectura, también en la de los periódicos, se aprende, se descubren cosas, incluso ajenas, paralelas a la noticia, por ejemplo, que se esté leyendo. Pasa como en los libros. Si hemos de formar y educar o por lo menos sabemos que existe la posibilidad de formar y educar, aunque sea en una pequeña parte, debemos ser conscientes (y lo somos) de que la verdad y la justicia, y también otros valores, han de estar en nuestros principios ineludibles.
-La unidad de España y los valores constitucionales han sido resaltados como pilares fundamentales del enfoque de "El Debate". En un mundo globalizado, ¿cómo planea la delegación de Castilla-La Mancha equilibrar esta visión de unidad nacional con la defensa de las tradiciones locales y los principios cristianos universales?
-La unidad nacional está formada por las tradiciones locales. La suma de estas es el todo, con muchos nexos comunes. Una de las argamasas fundamentales son los principios cristianos. La diversidad de España hace su unidad, al contrario que el independentismo, que usa la diversidad (muchas veces hasta se la inventa) para separar y para enfrentar. En realidad, está todo ahí, solo, y digo solo con mucha prudencia, se trata de navegar con decisión. El símbolo de El Debate es una nave, una nao, y en ella estamos embarcados mirando a un horizonte que para nosotros es mucho más profundo que la globalización.