La reforma luterana fue un mal y un pecado y no es celebrable, explica el sacerdote y teólogo Francisco José Delgado Martín. No puede ocultarse la verdad católica en aras del diálogo con los luteranos. El mismo Lutero negó además que el sentido de su lucha fuese denunciar los males morales de la Iglesia de su tiempo: se trataba y se ha tratado siempre de rechazar el depósito de la Fe tal como lo recibió y lo custodia y transmite la Iglesia. Es la última entrega de la serie que le ha dedicado HM Televisión. Pincha aquí para ver los capítulos anteriores.
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