El deseo humano como fuente del amor a Dios

Para aquellos lectores que hayan leído alguna obra del autor o su conocida trilogía espiritual, encontrarán en este libro, más ampliamente trazadas cuestiones que ya se apuntaban en libros anteriores. Juan del Carmelo en contra de lo que se pueda pensar, es solamente un seglar que, a finales de la década de los ochenta, se sintió llamado por el Señor. A partir de ese momento comenzó a efectuar una serie de retiros sucesivos en diversos monasterios de diversas órdenes religiosas, Cistercienses, Trapenses, Benedictinos y Jerónimos, así como también, en los dos Desiertos carmelitanos que hay en España, y vinculándose con carácter espiritual al Carmelo Teresiano. También en varias ocasiones ha viajado a Tierra Santa, buscando en aquellas tierras, la soledad y el silencio, y llevando vida eremítica en dependencias y eremitorios de los PP. Franciscanos. Todo lo anterior, le ha permitido leer un sin fin de libros de carácter espiritual, y acopiar bastante material bibliográfico, sobre la base del cual se ha confeccionado este libro. La profundidad y conocimiento que el autor tiene del desarrollo de la vida espiritual, le ha permitido dar a este libro y a todos los que componen su obra, una gran intensidad en sus apreciaciones y pensamientos de carácter espiritual, apoyándose en la doctrina de los grandes pensadores de la Iglesia, lo que lleva al lector a un mayor acercamiento a Dios. Paula Pasacal/ReL