El cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Antonio María Rouco Varela, mostró ayer la «adhesión incondicional» y «entrañable afecto» al Papa Benedicto XVI cuando «el poder del mal arrecia con inusitada fuerza contra su persona venerable persona», informa Efe.
El purpurado hizo estas manifestaciones durante la homilía de la  Eucaristía de Acción de gracias por los cinco años de pontificado de Joseph Ratzinger en la Catedral de la Almudena y en la que participaron la casi totalidad de los obispos españoles, el nuncio del Papa en España, monseñor Renzo Fratini, y el presidente del   Pontificio Consejo para los Laicos, el cardenal Stanislaw Rylko. También estuvo presente el presidente de la Conferencia Española de   Religiosos, el padre Elías Royón.

«Los ataques a Pedro –dijo Rouco, en referencia al Papa– son también ataque a la Iglesia. Por ello, al mismo tiempo que  agradecemos a Cristo su compasión por concedernos un pastor bueno y humilde, nos apiñamos en torno a él, para decirle: No estás sólo,   Santo Padre, la Iglesia te sostiene».
 
Además, el cardenal gallego hizo balance de los cinco años de   pontificado de Ratzinger y dijo que «no ha dejado de ser el humilde   trabajador de la viña de Cristo: en sus viajes apostólicos, en su fecundo magisterio, en la entrega sin reservas a los reclamos de la   Iglesia universal». «Humilde trabajador también en el momento de acoger la cruz con mansedumbre y serenidad en momentos difíciles de su ministerio», agregó. Asimismo, dijo que  «se comprende  la corriente de sincero afecto y de oración que ha desencadenado en tantos hijos de la Iglesia en los ataques de que ha sido objeto su Padre y Pastor universal», pero también aseveró que «los ataques contra la roca de   Pedro pretenden minar la estabilidad de la Iglesia y constituyen una amenaza a la confianza que los cristianos hemos depositado en la   promesa de Cristo».