Pocos sacerdotes, abandonos... ¿qué está pasando?

Cada vez hay más bautizados católicos en todo el mundo, y a la vez cada vez hay menos sacerdotes. También hay sacerdotes jóvenes que se ordenan y al cabo de pocos años abandonan el ministerio.

Jack Pierce, director ejecutivo de la Fundación Integrated Life, analiza el caso de EEUU con una encuesta realizada por la Universidad Católica de América. Explica a RomeReports que 6 de cada 10 sacerdotes menores de 45 años declaran agotamiento extremo. En EEUU, el 13% de los sacerdotes abandona el sacerdocio en los primeros 10 años. En algunas diócesis, llegan a ser la mitad los que abandonan así.

Una razón es que el sacerdote "joven" con problemas no se atreve a hablar de ellos hasta que es demasiado tarde y ya lo deja todo. Es un "semáforo" sin luz naranja, intermedia: pasa del verde al rojo desastre. No tienen un espacio donde puedan decir "tengo dificultades, necesito ayuda".

Formación continuada

Otra circunstancia es que la sociedad cambia muy rápido, y se encuentran retos para los que no les prepararon en el seminario. Pone un ejemplo, "cuando te ordenaron, las tasas de suicidio eran un 15% más bajas de lo que son ahora. Cuando te ordenaron no existía toda ese debate sobre el género... La formación continua es realmente importante".

Por otra parte, casi todas las vocaciones surgen de un niño o joven que mira a un sacerdote y lo admira y piensa "me gustaría ser como él y hacer como él". "Los sacerdotes sanos producen más sacerdotes", dice el analista.

Por eso la Fundación Integrated Life brinda apoyo psicológico y fraternal a los sacerdotes, sobre todo a los que viven aislados y cargando fardos pesados. Un cura necesita "paternidad, amistad y un acompañamiento continuo en su proceso de crecimiento". El apoyo de los feligreses, y poder hablar con libertad con hermanos sacerdotes, y apoyarse unos a otros, pueden evitar muchos casos tristes.