El humor ha sido siempre un instrumento eficaz contra el totalitarismo. Así ve la situación esta parodia de El hundimiento (2004) tras la unanimidad «norcoreana» de los partidos parlamentarios y los grandes medios de comunicación españoles para denigrar una afirmación de la realidad biológica que molesta a los ideólogos del lobby LGBTI. Pincha aquí para ampliar la información.
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