Hasta una docena de iglesias han sido atacadas en Francia durante la última semana en distintas partes del territorio del país, en una mezcla de profanaciones y vandalismo anticristiano.

Un ejemplo claro es el de la parroquia de Notre-Dame del Enfants de la ciudad de Nimes, en el sur Francia, cuyo templo ha sido profanado gravemente. En este caso, desconocidos pintaron en su interior una cruz con excrementos humanos, saquearon el altar, destrozaron el Sagrario y robaron las hostias consagradas, que fueron encontradas horas después entre montones de basura.

Ataques en distintos lugares de Francia

Otro caso que recoge el diario ABC es el de la parroquia de Notre Dame en Dijon (este de Francia). Los asaltantes destrozaron el altar, el Sagrario fue nuevamente víctima del ataque y las Sagradas Formas fueron esparcidas por el suelo y pisoteadas.

 

En Lavaur, en el departamento meridional del Tarn, la iglesia del pueblo fue asaltada por un grupo de jóvenes, que cogieron una imagen de Cristo y le retorcieron un brazo para que hiciera un gesto obsceno. Actos similares se han producido también estos días en la periferia de París.

Aunque sin conexión entre ellos sí destaca el aumento de los ataques a los cristianos y a sus símbolos en Francia. De momento, la jerarquía francesa prefiere mantener un perfil bajo esperando que las autoridades hagan su trabajo.

Sin embargo, sí que ha habido un caso muy grave y es el incendio de la importante iglesia parisina de Saint-Sulpice. En este caso, la Policía está convencida de que fue provocado. El suceso se produjo este pasado domingo tras la misa de mediodía cuando el templo se encontraba ya vacío. La Policía todavía busca al posible autor.