805. 8 de diciembre. Durante la procesión en la casa de las Compañeras Fieles, recibí un tierno y dulce reproche de la Santísima Virgen: "¿Por qué has tardado tanto tiempo en dárteme como un niña pequeñita?" Y en espíritu me puse a llorar sobre Su Hombro. ¡Qué cosa tan simple y verdadera!

806. 9 de diciembre. Via Crucis, a las cinco y media. Estación de las Hijas de Jerusalén. "Santifícate tú para santificar a los otros. Y santificar a los otros es darme a ellos, porque el Santo Soy Yo. Santo y Santificador."

807. 10 de diciembre. Via Crucis. En la Estación del Despojamiento. "Sí, Me arrancaban la piel
junto con las vestiduras. Tú has visto víctimas preparadas de este modo. Así lo fui Yo."

A medio día Le pedía yo perdón por las faltas que se me habían escapado durante la mañana y gracias para la tarde, El: "Esta mañana tuya representa todo tu pasado. El resto del día es como tu porvenir, hasta la muerte. Di con frecuencia esta plegaria.