1340. 11 de noviembre de 1943. Iglesia de Fresne.

"Sí. Dame las gracias por la victoria que hubo en 1918. Y agradéceme la prueba presente, que aún no termina. Todo queda en el dominio de la Misericordia.
Ojalá los hombres supieran emplear sus sufrimientos en reparación de los pecados nacionales y para conseguir la conversión de su patria, de la tierra de sus antepasados. Por lo menos tú, hijita, haz este ofrecimiento en lugar de los que no piensan en ello. Tú vive en los dominios del Amor, ¿qué otra vida podría ser mejor que esa? Porque es la Vida misma del Cielo.
Intensifica tus miradas de amor: que sea como la explicación y el complemento de tus acciones y como la respiración de tu alma. Porque la palabra de amor sigue con facilidad a la mirada de amor.
Es la vida de dos que no son sino Uno.
Si tienes algún desfallecimiento, dime: 'Mi Amor, mi Todo, yo habría podido ser más fiel el día de hoy. Perdóname'. Y así te humillas en una gran sinceridad y sin que tú lo sepas, Yo te aprieto sobre Mi Corazón amoroso. Esta es la Gracia que necesitas y que te basta. ¿Lo crees?

Es preciso que te arraigues en un solo deseo, el de no vivir sino para Mí. Tu vida será colmada. Espero desde hace tanto tiempo la dicha de darte mas. Ayúdame. Pídemelo. Tiende hacia Mí tus manos vacías.
Déjame lugar, todo el lugar. Comprende que vives en el destierro y aguardas el retorno del
Amado. Escúchalo de lejos y dile: 'Acerca Tu Aliento al mío, que viene de Ti. Tu Morada será mi morada y yo no podría vivir sin Tu Paso en el mío, sin Tu Voz en mi voz'. ¿No hay por ahí una oración que dice: 'Señor, abre mis labios'? Esto es para que el Espíritu Santo hable en vosotros, hijos de Dios."

 

 Gabriela Bossis (1874-1950) fue la menor de cuatro hijos en una familia católica francesa que la educó cristianamente. Se diplomó en enfermería y sirvió como tal en las misiones de Camerún, por lo que fue condecorada. Fue una persona abierta y comunicativa muy entregada a Cristo, pero que no sintió la vocación religiosa. En 1923 escribió su primera comedia, alcanzó celebridad por obras entretenidas y edificantes que se estrenaron en  numerosos países, incluso interpretando ella algún papel. En 1936 comenzó a transcribir sus diálogos con el Señor, una experiencia mística que vivió durante años. Fue dirigida espiritualmente por varios sacerdotes, que dieron luego testimonio de su paz interior. En uno de sus cuadernos escribe las siguientes palabras que escuchó de Cristo: "Tú has estado siempre bajo mi dirección". Todos esos escritos se agruparon en volúmenes agrupados bajo el título Él y yo. Murió después de experimentar durante varios meses dolencias respiratorias y pérdida de visión, que sobrellevó con el mismo espíritu de conformidad con la voluntad de Dios que guió toda su vida.