La escalada bélica entre Israel e Irán se ha disparado en las últimas horas
El arzobispo de Teherán y el patriarca de Jerusalén claman volver al diálogo para alcanzar la paz

Dominique Joseph Mathieu, cardenal de Teherán, a la izquierda, y el patriarca de Jerusalén.
Líderes católicos de Irán e Israel están rezando por la paz mientras la violencia sigue escalando, tras los asesinatos de altos mandos militares iraníes por parte de Israel, así como el lanzamiento de cohetes sobre Tel Aviv y otras ciudades israelíes.
Israel lanzó el primer ataque el 13 de junio, y el primer ministro Benjamín Netanyahu afirmó que el objetivo era detener el programa nuclear de Irán. Como respuesta, Irán lanzó cientos de misiles balísticos, la mayoría de ellos interceptados por Israel.
Una paz dialogada
Uno de los primeros en pedir que se detenga esta situación ha sido el arzobispo de Teherán-Isfahán de los latinos, el cardenal Dominique Joseph Mathieu, que ha expresado su preocupación por la escalada de las últimas horas.
"Con pesar observamos -manifestó- en estas últimas horas, una vez más, que se piensa alcanzar la paz con ataques preventivos en lugar de comprometerse a dialogar en la mesa de negociaciones".
"Recemos, por tanto, para que prevalezca la paz dialogada en torno a un consenso", exhortó el purpurado en declaraciones a AsiaNews y agregó: "Que el Espíritu Santo guíe este proceso".
En medio de la preocupación regional e internacional creciente, el cardenal Mathieu advirtió sobre el riesgo de un conflicto generalizado que azote Oriente Medio. "La tan temida escalada", señaló, "parece estar materializándose".
El arzobispo, nombrado por Francisco, describió previamente la identidad de la comunidad cristiana en Irán como marcada por "la cruz y la esperanza".
"Estamos llenos de esperanza", dijo el cardenal, refiriéndose al Año Jubilar en curso. Aunque la comunidad latina en Irán sigue siendo pequeña, con unos 22.000 católicos en una población de más de 84 millones, es diversa y activa, junto con las tradiciones caldeas, armenias y otras tradiciones cristianas.
A pesar de los desafíos, el cardenal Mathieu destacó la misión continua de la Iglesia en Irán como un signo de apertura. "A veces", dijo, "las puertas pueden parecer cerradas, pero aún hay personas que permanecen conectadas, que rezan incluso frente a ellas".
Por su parte, el cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, publicó una oración "por una paz justa" en su cuenta de X pocas horas después del primer ataque:
"Dios de paz, 'Tú eres el mismo ayer, hoy y siempre’ (Heb 13, 8). Tú nos dijiste: 'Mi paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy como el mundo la da. Que vuestros corazones no se turben ni tengan miedo’ (Jn 14, 27) dice la oración. Elevamos hacia Ti nuestros corazones cansados, Señor, anhelando tu luz en medio de las sombras del miedo y el desasosiego".
"Enséñanos a ser agentes de paz, pues 'dichosos los que construyen la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios' (Mt 5, 9). Siembra en nosotros las semillas de la reconciliación y haznos instrumentos de tu paz en un mundo herido", continúa.