Sorprendentes revelaciones en Dios nos quiere de Jesús Colina
«No siempre estábamos de acuerdo el cardenal Bergoglio y yo», señala el entonces cardenal Prevost
El Papa Francisco nombró a Robert Francis Prevost al frente del Dicasterio para los Obispos.
"No en todos los encuentros con el cardenal Bergoglio estábamos siempre de acuerdo", dice monseñor Prevost en un vídeo grabado durante una charla con una comunidad franciscana el 14 de marzo de 2023.
Jesús Colina, autor del primer libro que se ha publicado en el mundo sobre la figura del Papa León XIV, desvela en su libro Dios nos quiere (LibrosLibres), esa relación que tenían el entonces cardenal Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, y el General de los Agustinos para todo el mundo, Robert Francis Prevost.
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"Yo conocía a Jorge Mario Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires en su momento, cuando yo era general de los agustinos. Nos habíamos encontrado varias veces. Cuando fue elegido Papa, yo dije a algunos hermanos míos: 'bueno, eso está muy bien, gracias a Dios yo nunca voy a ser obispo'. No les voy a contar la razón, pero digamos que no en todos los encuentros con el cardenal Bergoglio estábamos siempre de acuerdo".
"Después lo invité a presidir la misa de apertura del capítulo general de los agustinos, el 28 de agosto de 2013 –siguió revelando el obispo Prevost–. Todos me habían dicho: 'el Papa nunca lo ha hecho'. Pero aceptó. Y presidió la misa en la iglesia de San Agustín, dónde está la tumba de Santa Mónica. Él, cuando iba a visitar Roma, siendo cardenal, siempre pasaba por la tumba de santa Mónica. En esta ocasión, al final de la misa, me dijo: 'ahora descansa en tu país'".
Álex Rosal con Jesús Colina tras la entrevista para el canal de YouTube de Religión en Libertad.
"Me dejó unos meses y después me nombró obispo. No sé cuándo viene la parte del descanso, pero aquí estamos", concluyó Prevost con una sonrisa.
Jesús Colina descubrió a Prevost como papable en 2023
El comunicador Jesús Colina, autor de Dios nos quiere (LibrosLibres) ya en enero de 2023 publicó en El Debate que Francisco había apuntado a un misionero como "futuro papable".
El Papa Francisco sustituía al cardenal Marc Ouellet al frente del Dicasterio para los Obispos, y nombraba en su lugar a un religioso como monseñor Robert Francis Prevost, que había sido superior general de los agustinos, y que en ese momento era obispo de un diócesis más bien pobre, como era la de Chiclayo en Perú.
Monseñor Prevost se enfrentaba con este encargo del Papa a un trabajo delicado: ofrecer al Pontífice candidatos para ser elegidos pastores por todo el mundo, así como acompañar a los prelados que tuvieran dificultades en su misión.
'Dios nos quiere' (LibrosLibres) de Jesús Colina.
"El cardenal Prevost necesita estar en contacto continuo con los cardenales del mundo", señala Jesús Colina. "Es uno de los pocos, no solo que conocían a los cardenales, sino sobre todo que los cardenales le conocían, y es ahí donde los periodistas no supimos ver esas señales. Hay que recordar que el Papa Francisco le nombró para casi todos los cargos de la curia romana que había y por haber".
Y hubo otro signo del Papa Francisco hacia monseñor Prevost que lo señalaba como hombre de su confianza, y posible sucesor suyo al frente de la Iglesia católica.
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Y era un mensaje que mandaba claramente a los cardenales que debían elegir al futuro Papa. Entre los cardenales, aunque todos tienen una base común de derechos, sin embargo, tienen distintas categorías. Hay tres grupos diferenciados entre ellos: cardenales diáconos, cardenales presbíteros y cardenales obispos.
A principios de este año, el Papa nombró a Prevost, del orden de los diáconos, cardenal del orden de los obispos, lo cual suponía romper con la tradición de esperar diez años a que un cardenal diácono pase a cardenal obispo. Esa decisión papal no pasó por alto entre los cardenales. Era un señalamiento claro.
"Pocas semanas antes de caer enfermo, el mismo Papa le había ascendido en la orden de los cardenales obispos, que es una decisión que normalmente un Papa no debería tomar. O sea, había muchos puntos, muchos signos claros que indicaba que Prevost era de alguna manera el candidato del Papa Francisco", subraya Jesús Colina.
El candidato de Francisco
"Creo, incluso que entre cardenales con los que el Papa Francisco tenía confianza, habrá mostrado algo. Tampoco es que Francisco dijera éste tiene que ser mi suceso por narices, pero sí que le veía en él como alguien capaz de, por una parte, tener una continuidad. Pero por otra parte, tener el talento que en ese momento falta la Iglesia y son dos elementos fundamentales uno".
¿Por qué los vaticanistas no vieron venir a Prevost?
"El motivo por el que los periodistas no habíamos tenido en cuenta Prevost -indica Jesús Colina-, es el motivo por el que los cardenales le votaron y pensaron en él. Es decir, cuando él es nombrado para el Dicasterio de los Obispos, llega a Roma y no hace ruido. Hace su trabajo y se dedica a sus cosas. Yo preguntaba qué estaba haciendo Prevost y me decían que hace su trabajo, que está muy callado y que no crea problemas a nadie. Tampoco daba declaraciones a los medios. Entonces los periodistas dijeron bueno, pues se ve que no le interesa hacer carrera. Y entonces por eso no apareció en listas. Y ese fue el motivo por el que los cardenales vieron en él una persona de valor, una persona humilde, una persona sencilla que no buscaba hacer carrera".
