Jueves, 02 de mayo de 2024

Religión en Libertad

Blog

Misericordia divina y humana

por El Blog de Juan del Carmelo

En el Drae podemos ver que…, el vocablo misericordia  tiene entre otras, dos acepciones que son las que nos interesan. De estas dos, una nos dice: “1. f. Virtud que inclina el ánimo a compadecerse de los trabajos y miserias ajenos”. Y la otra, nos dice “4. f. Rel. Atributo de Dios, en cuya virtud perdona los pecados y miserias de sus criaturas”. Es decir en la primera acepción se hace referencia a la misericordia ejercida por nosotros y en la segunda a la misericordia ejercida por Dios.

En la misericordia ejercida por Dios se nos califica a la misericordia como un atributo de Dios y al decirnos que por razón de la misericordia se perdonan los pecados y miserias de las criaturas, se nos está diciendo que la misericordia existe, por razón de amor. Es decir la misericordia tanto la divina como la humana son una expresión de amor.

Como siempre sucede lo nuestro no es nada más que un retrato, un pobre reflejo de lo divino. Nuestra misericordia al igual que la divina emana del amor, si carecemos de amor nunca podremos ser misericordiosos y sin embargo hemos de serlo pues el Señor nos dice: "36 Sed misericordiosos, como vuestro Padre es misericordioso. 37 No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; absolved y seréis absueltos”.  (Lc 6,36). Y también en el Monte de la Bienaventuranzas  Nuestro Señor prometió misericordia a los que practicasen la misericordia, al decir: "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia” (Mt 5,7).

 Desde luego que el ejercicio de la misericordia por nosotros es esencial, porque tal como nos dice la epístola de Santiago: “Un juicio sin misericordia le espera al que no usó de misericordia”. (Sant. 2,13). ¿Cómo pretendemos esperar y querer misericordia del Señor? Si resulta que nunca hemos sabido ni querido aplicarla con los demás. Y San Pablo escribe: "14 ¿Qué diremos, pues? ¿Qué hay injusticia en Dios? ¡De ningún modo!. 15 Pues dice Él a Moisés: Seré misericordioso con quien lo sea: me apiadaré de quien me apiade. 16 Por tanto, no se trata de querer o de correr, sino de que Dios tenga misericordia. 17 Pues dice la Escritura a Faraón: Te he suscitado precisamente para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea conocido en toda la tierra. 18 Así pues, usa de misericordia con quien quiere, y endurece a quien quiere”. (Rm 9,14-18).

            El fundamento de la misericordia de Dios está, según San Alfonso María Ligorio, en que: “La bondad es comunicativa por naturaleza; de suyo tiende a compartir sus bienes con los demás. Dios que por su naturaleza es la bondad infinita siente vivos deseos de comunicarnos su felicidad y por eso propende más a la misericordia que al castigo”. En las profecías de Isaías, se puede leer: "10 Porque los montes se correrán y las colinas se moverán, más mi amor de tu lado no se apartará y mi alianza de paz no se moverá - dice Yahvéh, que tiene compasión de ti”. (Is. 54,10). Y en el salmo 103 se puede leer: “8 Clemente y compasivo es Yahvéh, tardo a la cólera y lleno de amor; 9 no se querella eternamente ni para siempre guarda su rencor; 10 no nos trata según nuestros pecados ni nos paga conforme a nuestras culpas. 11 Como se alzan los cielos por encima de la tierra, así de grande es su amor para quienes le temen; 12 tan lejos como está el oriente del ocaso aleja él de nosotros nuestras rebeldías.”. (Sal 103,8-12).

            La bondad, nos dice San Alfonso María de Ligorio, es comunicativa por naturaleza; de suyo tiende a compartir sus bienes con los demás. Dios que por su naturaleza es la bondad infinita siente vivos deseos de comunicarnos su felicidad y por eso propende más a la misericordia que al castigo.  Y es por ello que dado que el amor de Dios que es infinito y consecuentemente, infinita es su misericordia, sea por medio de la misericordia, la forma en la que Dios nos expresas su amor. Pero no olvidemos que infinita es también su justicia. ¿Y Cómo Dios puedes ser al mismo tiempo justo y misericordioso? Esto solo Él lo sabe, porque sus decisiones y soluciones son siempre sorprendentes para nosotros. Dios no puede amar más que perdonando; también, me atrevo a decir, la alegría más grande de Dios es la de perdonar, puesto que su única forma de amarnos es ser misericordioso, su única forma de ser fiel a su amor del primer momento. El hombre puede dejar de ser hijo, pero Él no puede dejar de ser Padre. Él es infinitamente Padre y Padre sin fin, nos manifiesta el cardenal Etchegaray.           

            Resulta curioso, que los que pecan incesantemente, no se arrepienten y solo confían en la misericordia divina para salvarse, no son precisamente ejemplo de personas que practiquen en esta vida, la misericordia con los demás. Nos dice San Agustín a este respecto: “Nadie se lisonjee de impunidad fundado en la misericordia de Dios, porque habrá juicio: así como nadie después de convertido debe temer el juicio de Dios, pues este viene precedido de la misericordia”. Y continúa diciéndonos: “Aunque debes confiar mucho en la misericordia de Dios, debes también tener presente a toda hora su justicia. Teme pues a su justicia si deseas alcanzar su misericordia”.

            Existe hoy en día, un número muy grande de personas, que creen que hagan lo que hagan, ellas no se pueden condenar nunca, porque la misericordia de Dios lo impide, es su seguro de salvaguarda. Y San Alfonso María Ligorio, en su libro “Preparación para la muerte”,  escribió: “La misericordia de Dios es infinita; pero los actos de ella, o sea los de conmiseración, son finitos. Dios es clemente pero también justo”.

            Teniendo en cuenta lo anterior, es un problema actual de la teología compaginar la misericordia con la justicia divina. ¿Hasta dónde llega una y donde empieza la otra? El cardenal Danneels, escribe señalando que hemos ido evolucionando en la apreciación de lo que es la misericordia divina: “Antes Dios era un soberano exigente que no cerraba los ojos ante nada. Después se convirtió en un Dios súper misericordioso, un papá blandengue que lo perdona todo. Y hoy se llega a decir, incluso, que Dios puede sufrir igual que nosotros”. Para Jean Lafrance, “Existe hoy en día, un número muy grande de personas, que creen que ellas no se pueden condenar nunca, hagan lo que hagan porque la misericordia de Dios lo impide, es su seguro de salvaguarda. Ya San Agustín manifestó: “Aunque debes confiar mucho en la misericordia de Dios, debes también tener presente a toda hora su justicia. Teme pues a su justicia si deseas alcanzar su misericordia”.

            Para Jean Lafrance, “Dios no es una especie de abuelo indulgente y bonachón que pasa la esponja sobre nuestras majaderías. Tiene demasiado respeto por nuestra voluntad para obrar así. No se puede hablar de la misericordia si no se cree en su justicia y en su santidad”. También es opinión de Jean Lafrance, que: “la misericordia de Dios no es supresión de su justicia, sino el poder que tiene Dios de arrancar de un corazón endurecido, un grito, una llamada de socorro y, en el nombre mismo de su justicia, y no solamente de su misericordia, justificar al pecador”.

            Mi más cordial saludo lector y el deseo de que Dios te bendiga.

            Otras glosas o libros del autor relacionados con este tema.

  • Libro. AMAR A DIOS.- www.readontime.com/isbn=978461164509
  • Libro. ASEVERACIONES DEL SEÑOR.- http://www.readontime.com/ROT/dagosola/aseveraciones-del-senor_9788461557097.html
  • Libro. CONVERSACIONES CON MI ÁNGEL.- www.readontime.com/isbn=9788461179190
  • Dad gracias al Señor  17-10-13
  • Un regalo inmejorable           08-01-11
  • El gozo del Señor es nuestra fortaleza          15-05-10
  • Atributos divinos        05-09-13
  • Dios es un totalitario del espíritu      21-04-10
  • Celos del Señor          05-07-12
  • Celos de Dios 19-10-11
  • Instrumentos de Dios 04-06-10
  • ¿Pero…, Dios existe? 27-09-12
  • # Inmutabilidad divina          03-09-13
  • Nombre de Dios         25-12-10
  • Revelación del nombre de Dios        01-09-11
  • La presencia divina    13-07-09
  • Espada de doble filo  09-10-13
  • Poseer a Dios  17-03-13
  • Buscar el Rostro de Dios       28-02-12           

            La fecha que figura a continuación de cada glosa, es la de su publicación en la revista ReL, en la cual se puede leer la glosa de que se trate.

            Si se desea acceder a más glosas relacionadas con este tema u otros temas espirituales, existe un archivo Excel con una clasificada alfabética de temas, tratados en cada una de las glosas publicadas. Solicitar el archivo a: juandelcarmelo@gmail.com

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda