Paraguay se está convirtiendo en uno de los países más provida del mundo. Y la defensa del no nacido empieza desde el mismo gobierno, que ha mostrado un compromiso firme y verdadero por la vida y la familia. Y precisamente cuanto más presionado está siendo por la ONU y otros organismos internacionales más políticas provida está desarrollando Paraguay.

Un ejemplo de ello es la propuesta que acaban de realizar dos diputadas paraguayas para dar mayor dignidad a los niños muertos en el seno materno. Si sale adelante la propuesta podrán ser inscritos en el Registro Civil para que puedan tener nombre y apellidos y un buen entierro sin importar el peso o la edad gestacional. En este artículo de Aciprensa, Bárbara Bustamante explica en qué consiste el proyecto de ley de Paraguay:
 
Dos diputados en Paraguay han presentado un proyecto de ley para dar identidad jurídica a los bebés no nacidos y la oportunidad de que los padres puedan darle sepultura contando con un documento en el que se pueda consignar su nombre y apellido.


Según informa el Departamento de Prensa de la Cámara de Diputados del Paraguay, la iniciativa “que implementa el libro de defunciones de concebidos no nacidos en el Registro del Estado Civil” tiene tres objetivos:

1. “El reconocimiento con nombre y apellido de los bebés que fallecen en el vientre materno; la entrega del cuerpo a solicitud de los padres para fines póstumos, sin aplicación de criterios de estándares de peso o edad gestacional; y el registro de todas las muertes intrauterinas con fines estadísticos para el estudio e implementación de políticas preventivas de salud pública”.

2. “Este proyecto lo entregamos con amor, como homenaje a estos niños que desde la promulgación de esta Ley tendrán nombre y apellido”, dijo en una conferencia de prensa la diputada Olga Ferreira (independiente por Capital), una de las impulsoras del proyecto.

3. “También para los padres, que tendrán un lugar para llevar a esos niños y honrar esa vida, porque sepan que la vida se honra. Somos diputados que legislamos para la vida y, en este caso, queremos darles un poco de resignación a esos padres cuyos ángeles fueron al cielo”, agregó la titular de la Comisión de Derechos Humanos.


Horacio Cartes, presidente de Paraguay, defiende un país provida

José María Ibáñez (de la Asociación Nacional Republicana por el Departamento Central), el otro diputado impulsor de la moción, explicó que el documento viene a regularizar un artículo de la Constitución Nacional de Paraguay, que establece que la vida comienza desde la concepción.

Por su parte, Patricia Coronel, de la organización “Un mismo corazón, un mismo sentir” (de apoyo a padres de bebés fallecidos en el vientre, en el parto o en los primeros años de vida), agradeció el apoyo de los parlamentarios al proyecto y afirmó que “si esto se promulga, gracias a ellos nuestros niños ya no serán tratados como un desecho patológico”.

“Esto no elimina el dolor”, aclaró la activista pro vida, “pero por lo menos ya no tendremos sólo una ecografía vacía o una foto vacía, sino que sus hijos tendrán la identidad que le dieron, ese nombre que le eligieron con amor y que tanto buscaron dárselo”.


Los diputados informaron además sobre un proyecto de Resolución para solicitar la creación del Frente de Parlamentarios por la Vida y la Familia, que “forma parte de una agenda a favor de la vida”.

Los objetivos de este Frente son “la protección de la familia como fundamento de la sociedad; la promoción del respeto a la vida; el cumplimiento del principio de prioridad absoluta y respeto a su condición de persona desde su concepción, según lo establecido en la Carta Magna; entre otros”.

“Recientemente apoyamos un proyecto de declaración que promueve los valores de la familia como principio básico de convivencia en la sociedad, con lo que se demuestra que existe un grupo de parlamentarios que está comprometido con esta agenda, bajo la responsabilidad de defender, proteger y promocionar la vida desde la concepción hasta su final natural”, dijo el diputado Ibáñez.