Maricarmen, una anciana mujer de Galicia, estaba en su casa este 1 de noviembre cuando sonó el timbre de su puerta. Eran dos funcionarios del Servicio de Salud gallego, que no llegaban con precisamente buenas noticias: llamaban para "informarle" de que en menos de 24 horas matarían a su hija B.E.A., enferma a sus 54 años de esclerosis múltiple y sujeta a los cuidados de Maricarmen.

En representación de la madre, a su vez representante de su hija, Abogados Cristianos ha acudido a la justicia para paralizar la eutanasia prevista esta misma tarde en Santiago de Compostela.

Los abogados alegan no solo que la madre "es contraria a que le apliquen la eutanasia", sino que la misma afectada "no cumple con los requisitos para ser eutanasiada".

"No está en pleno uso de sus facultades ni tiene un sufrimiento constante pues no toma ninguna medicación para el dolor", argumentan desde la organización de juristas.

De este modo, Abogados Cristianos se encuentra en una lucha a contrarreloj por defender una vida que las autoridades eliminarán previsiblemente esta tarde.

La organización de abogados ha solicitado medidas cautelarísimas al Juzgado de Instrucción que por turno corresponda, en el marco de una denuncia contra el Hospital Universitario de Santiago y la Comisión de Garantía y Evaluación de la eutanasia de Galicia. Los acusa de un posible delito de eutanasia (art.143.4 CP) y otro de inducción al suicidio (art. 143.1 CP).

La presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, insiste en que "con la eutanasia se abre la veda a casos como éste en el que se acaba con la vida de las personas en contra de su voluntad".

Destaca que "la línea entre la eutanasia y el homicidio es muy delgada" y sentencia: "A cualquiera nos puede pasar lo mismo. Con la eutanasia legalizada todos estamos en riesgo. Puede que tú quieras luchar por la vida de un familiar y por una supuesta decisión médica acaben con su vida sin tu consentimiento. Es mucho más barato aplicar la eutanasia a los pacientes que proporcionar cuidados paliativos", concluye el comunicado emitido esta mañana por Abogados Cristianos.