Los números son importantes para ellos. Hacer números es muy racional y quieren ser muy racionales. "Números récord se reunirán en apoyo a la racionalidad esta primavera", dice bien grande el titular de la nota de prensa de la "Reason Rally" (La nota en PDF en inglés, aquí). Y el primer párrafo de la nota de prensa, el más importante, el que todos los periodistas debemos tener en cuenta, es contundente en sus cifras:

"Millones de americanos, aproximadamente el 16%, se consideran a sí mismos no religiosos, según la Encuesta Americana de Identificación Religiosa [ARIS]. Bien sea que los miembros de este grupo se refieran a sí mismos como ateos, agnósticos, humanistas seculares o cualquier otro término descriptivo usado para expresar rechazo a la creencia en Dios, el secularismo está en auge".


A continuación, los organizadores del "Rally de la Razón" en Washington, una especie de "marcha del orgullo ateo", invitan a la gran marcha unitaria de las asociaciones "seculares" de todo el país el 24 de marzo. Con un típico americo-centrismo y bastante poca amplitud histórica, afirma la nota de prensa incluso que será "el mayor evento secular en la historia del mundo". Ahí es nada: como si la URSS y China no hubieran celebrado docenas de multitudinarias manifestaciones laicistas.


En nuestro siglo XXI europeo, la mayor manifestación laicista fue la de Berlín en septiembre de 2011, con 9.000 manifestantes (la región metropolitana tiene 4,4 millones de habitantes), con ocasión de la visita del Papa.

De hecho, las visitas papales suelen agitar a los laicistas europeos, pero tampoco consiguen cifras impresionantes: la de Benedicto XVI a Barcelona congregó a 2.500 personas; el "pope" del ateísmo grosero, Richard Dawkins, consiguió reunir unas 3.000 personas en Londres (cifras de la Policía londinense, para una región metropolitana de 20 millones de habitantes). Y la manifestación anti-JMJ de Madrid en agosto consiguió reunir 5.000 personas. El laicismo europeo no da más de sí.


¿Y en Estados Unidos? Hace 10 años, en 2002, ya celebraron una marcha unitaria en Washington con un eslógan oficial en la camiseta: "Libres, orgullosos y en marcha, americanos sin Dios". Es decir, marcha del orgullo ateo. Convocaban numerosas asociaciones, con 20 oradores y actividades musicales. Juntaron 2.000 personas, según recoge Wikipedia.

¿De verdad conseguirá esta marcha del 24 de marzo reunir más manifestantes que en Berlín? Aunque Richard Dawkins ha anunciado su participación en Washington, en Londres no consiguió gran cosa.

Y la violencia de los manifestantes anti-JMJ de Madrid se ha difundido por todo el mundo, con esos vídeos de laicistas agresivos gritando e insultando a niñas de 15 años porque "estaban rezando y eso me provocaba" o "tenían una mochila de peregrino".

Además, el comunicado del "Reason Rally" hace trampas con los números de "no creyentes" en EEUU.

La encuesta IRIS (de 2008, analizada con detalle AQUÍ en español) no afirma que haya un "grupo" de un 16% que usen varios "términos descriptivos para expresar rechazo a la creencia en Dios".

La pregunta de IRIS era: “¿cuál es su identidad religiosa?”. Y la respuesta de ese 15% de encuestados (16% si se redondea hacia arriba) fue: “ninguna”.

Pero luego, cuando a esos mismos "sin identidad religiosa" se le preguntaba si creían en Dios o en un poder superior... ¡la mitad de ellos sí creían! Sólo un 7% de ese 15% se definía como ateo. El resto, básicamente, evitan la disciplina de una comunidad de fe o un sistema de creencias definido.

Por ejemplo, entre las mujeres "sin religión", más de un tercio cree que “definitivamente, hay un Dios personal”. Entre los hombres, eso cree una quinta parte de los “sin religión”.
 
Además, uno de cada cuatro hombres “sin religión” admite que “hay algún tipo de Poder Superior, pero no un Dios personal”. Eso creen el 22% de las mujeres “sin religión”. Es decir, según IRIS, sumando ambos grupos, el 51% de los "sin identidad religiosa" cree en Dios o “un Poder Superior”.


De hecho, muchos de ellos son protestantes (algunos muy conservadores, otros muy progresistas) que insisten en que "yo sigo a Jesús, no una religión", y por eso en la encuesta aseguran que no tienen identidad religiosa, pero que "definitivamente, hay un Dios". ¡A estos protestantes la Reason Rally los cuenta como ateos!

Lo que abunda en EEUU no es el ateo militante, sino las personas vagamente espirituales que viven en una "cultura de la desvinculación", huyendo de todo compromiso, incluso nominal, con cualquier organización o colectivo vertebrado.

Es poco sincero que el ateísmo militante llame a estos "seculares" o "agnósticos", y más aún que los considere una "comunidad" o "movimiento": no hay casi nada de eso, sólo hay individuos desvinculados...

Es difícil llenar manifestaciones con gente desvinculada. Los organizadores lo intentarán con el grupo de rock "Bad Religion", la cantante ex-judía australiana Shelley Segal, el ya mencionado Dawkins (del que aseguran que "ha hecho más por nuestra causa que cualquier otro"), el ex-pastor protestante Dan Barker y Hemant Mehta, autor de "Yo vendí mi alma en eBay".

Y para niños, organizarán un campamento en el que les enseñarán las técnicas para buscar unicornios rosas invisibles, que -según encuentros laicistas para niños en varias asociaciones ateas- es la forma de buscar a Dios según el método científico.