FLORILEGIO DE MÁRTIRES

Y se trata de eso, de un florilegio. “Existen muchos artículos y obras escritas -refiere por aquel entonces el autor- especialmente sobre el sacrificio sangriento de millares de vidas consagradas a Dios… mas reconociendo que a medida que van pasando los años, van quedando también en el olvido altos ejemplos de virtud, me he decidido a escribir este pequeño libro con datos verdaderamente históricos”.

Aquí podéis descargar, esta versión, para leerlo cuando podáis. El original son 60 páginas de tamaño octavilla.

http://www.ministridei.es/archivos/santosypopulares/8278553766554774.pdf

Preparando una entrevista, me lo encuentro grabado para quien desee escucharlo. Me llama la atención que han elegido para los cinco vídeos al siervo de Dios Adrián Aguado García-Flores, párroco de la toledana localidad de La Torre de Esteban Hambrán. Os dejo los enlaces:

 

 

 

 

 

 

EL AUTOR, BENJAMÍN MARTÍN SÁNCHEZ

Canónigo de la Catedral de Zamora, la editorial Apostolado Mariano, que publicaba sus obras de divulgación, conserva en su página web la necrológica del benemérito sacerdote, que publicó El Norte de Castilla , el 2 de agosto de 2007:

La iglesia de San Torcuato, donde celebró misa durante 60 años, se quedó pequeña. Cientos de personas se acercaron ayer por la mañana al templo para dar su último adiós a Benjamín Martín Sánchez, conocido en la ciudad como don Benjamín, quien falleció en la tarde del martes 31 de julio en la casa sacerdotal ´San José´, donde residía. El próximo 17 de agosto habría cumplido 102 años de vida. Don Benjamín nació en Roelos de Sayago el 17 de agosto de 1905. Estudió en el Seminario Conciliar de San Atilano de Zamora y en la Universidad Pontificia de Comillas. Obtuvo el doctorado en Teología y el Bachiller en Derecho Canónico. Fue ordenado sacerdote en Comillas el 25 de julio de 1929 y desde entonces desempeñó numerosos ministerios sacerdotales. Fue coadjutor de Fuentesaúco en 1929. Prestó el servicio militar durante la Guerra Civil, en 1936, fue ecónomo de Fuentesaúco en 1939 y teniente arcipreste de Fuentesaúco en 1940. Ejerció de párroco de San Torcuato en 1944; confesor del Seminario Mayor de Zamora, 1945; profesor de Introducción General a la Sagrada Escritura, Griego Bíblico y Lengua Hebrea, en 1951; vicerrector del Seminario Mayor de Zamora, en 1951; rector del Seminario Mayor de Zamora, en 1958; canónigo de la Catedral de Zamora, en 1959; examinador prosinodal, en 1970; maestrescuela de la Catedral de Zamora, en 1980, y colaborador en la pastoral de la parroquia de San Torcuato desde su jubilación.

Ha sido un escritor prolífico durante toda su vida entre cuyas obras destacan numerosos folletos de divulgación, una gramática hebrea y una Introducción a la Sagrada Escritura. En agosto del 2005, con motivo de su cien cumpleaños, la Diócesis de Zamora le homenajeó por la dilatada vida e intensa tarea pastoral, docente y publicista. De esta manera, el 13 de agosto de 2005 se celebró en la iglesia de San Torcuato una eucaristía de acción de gracias por sus cien años de vida. Falleció, dos años después,  el 1 de agosto de 2007.