Viernes, 26 de abril de 2024

Religión en Libertad

Los que predican al Papa


Son los elegidos para predicar los ejercicios espirituales al Pontífice y a la curia. El próximo será el cardenal Ravasi. A continuación, una exposición detallada de todos los que han tenido esta responsabilidad antes que él

por Sandro Magister

Opinión

Después de haberlo llamado en el 2007, cuando era todavía un simple sacerdote, para que redactara las meditaciones para el Via Crucis del Viernes Santo en el Coliseo, Benedicto XVI eligió ahora a Gianfranco Ravasi - convertido en cardenal presidente del Pontificio Consejo para la Cultura -, como predicador de los ejercicios espirituales para el Papa y la curia romana, que se celebrarán al comienzo de la próxima Cuaresma.

Hasta ahora, esta doble llamada se había hecho a solamente otros dos eclesiásticos: al cardenal Angelo Comastri, que predicó los ejercicios en el 2003 y escribió las meditaciones en el 2006, y al mismo Joseph Ratzinger, a quien Juan Pablo II llamó para predicar los ejercicios en 1983 y a componer las meditaciones para el Via Crucis en el 2005, pocos meses antes de ser elevado al trono de Pedro como Benedicto XVI.

Este raro privilegio, que asocia la figura de Ravasi a la de Ratzinger, probablemente aumentará su puntaje como “papable” en el circo mediático, más que en el Colegio cardenalicio.

Mientras tanto, la noticia ofrece la ocasión para arrojar una mirada retrospectiva sobre el institucionalización misma de las predicaciones cuaresmales en la curia, que ahora son una tradición, aunque no muy antigua.

Su institucionalización como cita fija se remonta a 1929. Aunque desde el siglo XVI existe la figura del predicador apostólico – hoy llamado predicador de la Casa Pontificia, cargo que desde 1743 está reservado a la Orden de los Franciscanos Capuchinos –, es solamente con Pío XI que en el Vaticano comienzan a predicarse los ejercicios espirituales según el estilo ignaciano.

El papa Achille Ratti fue un convencido admirador de san Ignacio de Loyola, tanto que en julio de 1922, pocos meses después de su elevación al papado, lo proclamó "patrono de los ejercicios espirituales y de todas las instituciones que de alguna manera llevan a cabo su obra”.

El 20 de diciembre de 1929 Pío XI publicó una encíclica dedicada a los ejercicios espirituales, la "Mens nostra", en la que, entre otras cosas, comunicó "urbi et orbi" su decisión de celebrar anualmente en el Vaticano un curso de ejercicios.

Anteriormente, el pontífice milanés ya había promovido cursos de ejercicios en el Palacio Apostólico – en 1925 y en 1928, por ejemplo – pero fue solamente con la "Mens nostra" que los ejercicios espirituales se convirtieron en una cita fija para el Papa y para sus más estrechos colaboradores.

Una cita – inicialmente establecida en la primera semana de Adviento – que no se celebró muy pocas veces, por motivos bien determinados.

En 1950 Pío XII la trasladó al comienzo del año siguiente, para no interrumpir las manifestaciones y las audiencias – prácticamente diarias – previstas para el Año Santo en curso. Por eso los ejercicios fueron predicados dos veces en 1951: en enero – los postergados el año anterior – y en diciembre.

En 1962 Juan XXIII los sustituyó con un retiro personal de una semana en la Torre de San Juan, en preparación al inminente Concilio Ecuménico.

Tampoco se celebraron en 1963, porque Pablo VI, elevado al papado en junio de ese año, los consideró como un impedimento para la celebración de la segunda sesión del Concilio, razón por la cual decidió trasladarlos a febrero del año siguiente, al comienzo de la Cuaresma.
Lo mismo ocurrió con las sesiones conciliares de 1964 y 1965, de tal modo que este desplazamiento dejó de ser temporario para tornarse definitivo. Desde 1964 los ejercicios se celebran habitualmente en el Vaticano, ya no más en Adviento sino en la primera semana de Cuaresma.

¿Pero quiénes han sido en estos más de ochenta años los hombres elegidos por los Papas para predicar los ejercicios espirituales en la Curia? El registro es llevado por la Prefectura de la Casa Pontificia, que ha publicado un listado casi completo.

Con Pío XI los elegidos fueron sobre todo jesuitas (los padres Galileo Venturini, Giovanni Oldrà, Alessio Magni, Giuseppe Filograssi, Agostino Garagnani, Giuseppe Golia, Antonio Savani, Ottavio Marchetti, Pietro Righini, Giuseppe Maria de Giovanni), pero también oblatos de Rho (el obispo Ludovico Cattaneo, de Ascoli Piceno, y el padre Giustino Borgonovo), capuchinos (el obispo Luca Ermenegildo Pasetto y el padre Leone da Caluso) y redentoristas (el obispo Carmine Cesarano, de Aversa, y el padre Michele Mazzei).

Pio XII concentró la elección en jesuitas (los padres Filograssi, Giuseppe Messina, Paolo Dezza – futuro cardenal-, Ambrogio Fiocchi, Venturini, Giuseppe Massaruti, Vittorio Genovesi, Luigi de Poletti, Righini, Luigi Celebrini, de Giovanni, Antonio Tucci, Luigi Ambruzzi, Maurice Flick, Giorgio Lojacono, Anselmo Arù), con la sola excepción de 1941, cuando llamó a un oblato de Rho (el padre Borgonovo).

En 1958 Juan XXIII eligió a un jesuita (el padre Carlo Messori Roncaglia), en 1959 al obispo de Casale Monferrato, Giovanni Angrisani, en 1960 al párroco romano monseñor Pirro Scavizzi (de quien está en curso la causa de beatificación) y en 1961 al predicador apostólico, el padre Ilarino, de Milán.

Pablo VI inauguró sus elecciones – en 1964 – con el padre redentorista alemán Bernard Häring, rompiendo así la costumbre de llamar solamente a eclesiásticos italianos. Y es también el papa Giovanni Battista Montini el que llama por primera vez a un cardenal para predicar los ejercicios espirituales. El elegido, en 1976, fue Karol Wojtyla, quien dos años después será elegido Papa.

Aparte del caso llamativo recién citado, muchas veces, a partir de 1973, ocurrió que la predicación de los ejercicios espirituales fue seguido por un avance en el "cursus honorum" eclesiástico.

Basta recorrer el listado de los predicadores reproducido más abajo para verificarlo.

Muchos de los predicadores se convirtieron luego en cardenales: Dezza, Javierre Ortas, Pironio, Anastasio Ballestrero, Carlo Maria Martini, Lucas Moreira Neves, James A. Hickey, Georges M. Cottier, Ersilio Tonini, Jorge A. Medina Estevez, Tomas Spidlik, Christoph Schonborn, Francois-Xavier Nguyen van Thuan, Angelo Comastri.

Otros – en muy breve tiempo – fueron elevados al episcopado, como Mariano Magrassi con Pablo VI, Bruno Forte con Juan Pablo II y Enrico dal Covolo con Benedicto XVI.

Al comienzo de su pontificado, Benedicto XVI llamó a predicar los ejercicios espirituales a cardenales que estaban al final de su carrera: Marco Cè, emérito de Venecia, en el 2006; Giacomo Biffi, emérito de Boloña, en el 2007; el jesuita más que octogenario Albert Vanhoye, en el 2008; y Francis Arinze, prefecto emérito de la Congregación para el Culto Divino, en el 2009. Pero después cambió sus criterios de elección.

Son pocos los que han tenido el privilegio de predicar los ejercicios espirituales más de una vez. Entre éstos se destacan los nombres del jesuita Dezza (en 1942 con Pío XII y en 1967 con Pablo VI) y del cardenal Biffi (elegido también en 1989 con Juan Pablo II).

Una curiosidad respecto al actual pontífice. En una entrevista publicada por el mensuario "30 Giorni", de agosto del 2003, el entonces cardenal Ratzinger reveló que algunos años antes de su nombramiento en 1977 como arzobispo de Freising-Munich, "quizás en 1975", Pablo VI lo había invitado a predicar los ejercicios espirituales. "Pero yo no me sentía suficientemente seguro ni de mi dominio del idioma italiano ni del francés para prepararlos y atreverme a una aventura tal, por eso dije que no".

Se trató de todos modos de un "no" provisorio. Efectivamente, en 1983, menos de dos años después de haber sido llamado a Roma por Juan Pablo II para presidir la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal Ratzinger fue llamado para predicar los ejercicios espirituales.

Como ya dijimos, Ratzinger fue también el autor de las meditaciones del último Via Crucis de Juan Pablo II en el Coliseo, el del 2005, que pasaron a la historia por la referencia a la “suciedad en la Iglesia”.

La tradición de asignar las meditaciones del Via Crucis a personalidades externas es más bien reciente, al haber sido introducida por Juan Pablo II en 1985.

Pero mientras las predicaciones cuaresmales han sido siempre predicadas por clérigos, las meditaciones – como se ve en el listado reproducido al final – han sido confiadas también a laicos – incluyendo a un grupo de periodistas y a una pareja de cónyuges focolares – y a representantes de otras confesiones cristianas, como el patriarca ortodoxo Bartolomeo I o la monja protestante Minke de Vries.

Además del teólogo Hans Urs von Balthasar, el otro caso único de promoción posterior a la redacción de las meditaciones es el que se refiere a Ravasi, que poco meses después, de prefecto que era de la Biblioteca Ambrosiana , fue llamado a Roma como arzobispo y presidente del Pontificio Consejo para la Cultura.

Para el próximo 29 de marzo, Viernes Santo, la tarea de escribir las meditaciones para el Via Crucis en el Coliseo fue confiada a algunos jóvenes libaneses, quienes participaron en la vigilia de oración celebrada en Beirut durante el viaje de Benedicto XVI al Líbano el pasado mes de setiembre.

LOS PREDICADORES DE LOS EJERCICIOS ESPIRITUALES AL PAPA Y A LA CURIA

Con Pablo VI

1964 Bernard Haring, redentorista alemán, teólogo
1965 Ambroise-Marie Carré, dominico francés, predicador en Notre-Dame (en París)
1966 Giuseppe Carraro, obispo de Verona
1967 Paolo Dezza, jesuita, cardenal en 1991
1968 René Voillaume, sacerdote francés, de los Hermanitos de Jesús
1969 Gabriel M. Brasò, catalán, abad presidente de la Congregación de Subiaco de la Orden de San Benito (Congregación Sublacensis)
1970 Jacques Loew, dominico francés, iniciador del experimento de los curas obreros
1971 Divo Barsotti, sacerdote italiano, fundador de la Comunidad de los hijos de Dios
1972 Maurice Zundel, sacerdote suizo
1973 Antonio María Javierre Ortas, español, rector de la Pontificia Universidad Salesiana, cardenal en 1988
1974 Eduardo F. Pironio, argentino, obispo de Mar del Plata y presidente del CELAM, cardenal en 1976
1975 Anastasio Ballestrero, carmelita, arzobispo de Bari y después de Torino, cardenal en 1979
1976 Karol Wojtyla, cardenal arzobispo de Cracovia, elevado al papado en 1978
1977 Mariano Magrassi, abad benedictino, nombrado en el mismo año arzobispo de Bari
1978 Carlo Maria Martini, jesuita, rector del Pontificio Instituto Bíblico, arzobispo de Milán en 1979 y cardenal en 1983

Con Juan Pablo II

1979 Tullio Faustino Ossanna, Hermano Conventual
1980 Lucas Moreira Neves, dominico, cardenal en 1988
1981 Jerzy Ablewicz, obispo de Tarnow (Polonia)
1982 Stanislas Lyonnet, padre jesuita
1983 Joseph Ratzinger, cardenal prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe
1984 Alexandre do Nascimento, cardenal arzobispo de Luanda (Angola)
1985 Achille Glorieux, arzobispo, nuncio jubilado
1986 Egidio Vigano, rector mayor de los salesianos
1987 Peter-Hans Kolvenbach, prepósito general de los jesuitas
1988 James A. Hickey, arzobispo de Washington, cardenal en junio del mismo año
1989 Giacomo Biffi, cardenal arzobispo de Boloña
1990 Georges Marie Cottier, padre dominico, teólogo de la Casa Pontificia, cardenal en el 2004
1991 Ersilio Tonini, arzobispo emérito de Ravena, cardenal en 1994
1992 Ugo Poletti, cardenal, ex vicario de Roma
1993 Jorge A. Medina Estévez, obispo de Rancagua (Chile), cardenal en 1998
1994 Giovanni Saldarini, cardenal arzobispo de Turín
1995 Tomás Spidlík, padre jesuita, cardenal en el 2003
1996 Christoph Schönborn, dominico, arzobispo de Viena, cardenal en 1998
1997 Roger Etchegaray, cardenal presidente del Pontificio Consejo “Justicia y Paz”
1998 Ján Chryzostom Korec, jesuita, cardenal obispo de Nitra (Eslovaquia)
1999 André-Mutien Léonard, obispo de Namur (Bélgica), promovido como arzobispo de Malinas-Bruselas en el 2010
2000 François Xavier Nguyen Van Thuan, arzobispo presidente del Pontificio Consejo “Justicia y Paz”, cardenal en el 2001
2001 Francis E. George, Oblato de María Inmaculada, cardenal arzobispo de Chicago
2002 Cláudio Hummes, franciscano, cardenal arzobispo de San Pablo (Brasil)
2003 Angelo Comastri, arzobispo prelado de Loreto, cardenal en el 2007
2004 Bruno Forte, teólogo, promovido a arzobispo de Chieti-Vasto en junio del mismo año
2005 Renato Corti, obispo de Novara

Con Benedicto XVI

2006 Marco Cé, cardenal, patriarca emérito de Venecia
2007 Giacomo Biffi, arzobispo emérito de Boloña
2008 Albert Vanhoye, jesuita francés, cardenal
2009 Francis Arinze, cardenal, prefecto emérito de la Congregación para el Culto Divino
2010 Enrico dal Covolo, salesiano, nombrado en el mismo año rector de la Pontificia Universidad Lateranense y obispo
2011 Francois-Marie Lethel, carmelita descalzo francés, prelado secretario de la Pontificia Academia de Teología
2012 Laurent Monsengwo Pasinya, cardenal arzobispo de Kinshasa
2013 Gianfranco Ravasi, cardenal presidente del Pontificio Consejo para la Cultura

LOS AUTORES DE LAS MEDITACIONES DEL VIA CRUCIS EN EL COLISEO

Con Juan Pablo II

1985 Italo Alighiero Chiusano, escritor italiano
1986 André Frossard, periodista y escritor francés
1987 Miguel Obando Bravo, salesiano, cardenal arzobispo de Managua
1988 Hans Urs von Balthasar, teólogo suizo, designado cardenal para el consistorio de junio de 1988
1989 Marek Skwarnicki, escritor polaco
1990 Michel Sabbah, patriarca latino de Jerusalén
1991 Ignacio M. Calabuig Adan y Silvano M. Maggiani, Siervos de María
1992 Miloslav Vlk, arzobispo de Praga, cardenal en 1994
1993 Anna Maria Canopi, abadesa de la abadía benedictina "Mater Ecclesiae", Isla de San Julio
1994 Bartolomeo I, patriarca ecuménico de Constantinopla
1995 Minke de Vries, monja de la comunidad protestante de Grandchamp, Suiza
1996 Vinko Puljic, cardenal arzobispo de Vrhbosna-Sarajevo
1997 Karekin I, Catholicós de todos los armenios
1998 Olivier Clément, teólogo ortodoxo francés
1999 Mario Luzi, poeta italiano
2000 Juan Pablo II (meditaciones escritas personalmente por él)
2001 John H. Newman (de sus escritos)
2002 Los periodistas John M. Thavis, CNS, Estados Unidos; Alexej M. Bukalov, Rusia; Henri Tincq, "Le Monde", Francia; Gregory Burke, Fox News, Estados Unidos; Ángel Gómez Fuentes, España; Erich B. Kusch, Alemania; Hiroshi Miyahira, Japón; Jacek Moskwa, Polonia; Marina Ricci, TG 5, Italia; Aura Miguel Vistas, Radio Renasença, Portugal; Luigi Accattoli, "Corriere della Sera", Italia; Sophie De Ravinel, "I-Media", Francia; Valentina Alazraki, México; Marie Czernin, Alemania
2003 Karol Wojtyla (de los ejercicios espirituales predicados por él en 1979 a la curia romana)
2004 André Louf, monje trapense belga
2005 Joseph Ratzinger, cardenal prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe

Con Benedicto XVI

2006 Angelo Comastri, arzobispo coadjutor arcipreste de San Pedro, al año siguiente cardenal
2007 Gianfranco Ravasi, sacerdote, en setiembre del mismo año arzobispo presidente del Pontificio Consejo para la Cultura, cardenal en el 2010
2008 Joseph Zen, cardenal obispo de Hong Kong
2009 Thomas Menamparampil, salesiano, arzobispo de Guwahati (India)
2010 Camillo Ruini, cardenal, ex vicario de Roma
2011 Maria Rita Piccione, monja de clausura, preside los monasterios agustinos de Italia
2012 Danilo y Anna Maria Zanzucchi, cónyuges focolares
2013 Jóvenes libaneses

Traducción en español de José Arturo Quarracino, Buenos Aires, Argentina
Comentarios
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda