Llevemos al prójimo hacia Dios para que juntos disfrutemos de Él

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Cuando aprendas a amarte a ti mismo amando a Dios, arrastra al prójimo hacia Dios para que juntos disfrutéis del bien, gran bien, que es Dios 🔹San Agustín. Sermón 301A, 6🔹

▶️ En el contexto de la Espiritualidad Católica: La genialidad de esta frase reside en que permite ver la interconexión entre el amor y acción. San Agustín nos muestra que el amor a Dios y el amor al prójimo no son compartimentos estancos, sino dimensiones inseparables de una misma realidad. El amor al prójimo nace que Dios depositó en nosotros, haciéndonos a su imagen y semejanza. Ambos aspectos del amor se unen en una experiencia de Dios, se encuentra en la comunión fraterna que podemos vivir entre nosotros.

Debemos romper el círculo vicioso del egoísmo y a entrar en el círculo virtuoso del amor. Esta frase nos invita a ver las huellas de Dios en todo lo creado, no por nuestros méritos personales, sino por la Gracia de Dios. Nos invita a amar a nuestro prójimo, no como un deber a cumplir, sino como una consecuencia natural de nuestro amor a Dios. También nos invita a disfrutar juntos del "gran bien" que es Dios, la fuente inagotable de alegría y plenitud.

Este es el objetivo final: la comunión de todos los cristianos en el amor de Dios. San Agustín nos recuerda que Dios es el Bien Supremo, la fuente de toda paz y plenitud. La evangelización no es un acto solitario, sino un camino compartido entre todos. Al llevar a otros a Dios, no solo les hacemos un favor, sino que también enriquecemos nuestra propia experiencia de fe. Si no evangelizamos, qué sentido tiene creer en Dios. La paz interior se multiplica cuando se comparte la Gracia recibida por Dios. El "gran bien" que es Dios se experimenta de manera más profunda y significativa en comunidad.

▶️ En el contexto de la evangelización digital. Esta frase resume la esencia de la espiritualidad que debemos mostrar y difundir en las redes. Una acción que enfatiza la búsqueda de Dios en el interior y la transformación de lo que somos cada uno de nosotros. En las redes sociales la evangelización no se trata solo de compartir información, sino de compartir nuestra propia experiencia de fe, de "arrastrar" con humildad y paz, a otros hacia Dios a través de nuestro testimonio. Para ello, a autenticidad es clave. Compartir nuestra propia experiencia, nuestras luchas y alegrías, es mucho más efectivo que predicar desde una posición de superioridad ideológica.

▶️ Preguntas para reflexionar: ¿Estamos dispuestos a aceptar este desafío de llevar a Dios a los demás? ¿Estamos dispuestos a "arrastrar" a nuestro prójimo hacia Dios, no con imposición, sino con amor, paz y esperanza?

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