La inocencia nos llena de paz. ¿Por qué nos da miedo?

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Elijamos, pues, hermanos, el amor que haga nuestra vida inocente y nuestra muerte tranquila 🔹San Agustín. 299E, 1🔹

▶️En el contexto de la Espiritualidad Católica: En este pensamiento, San Agustín nos presenta un llamado a la acción, invitándonos a reflexionar sobre el tipo de amor que cultivamos y su impacto en nuestra existencia presente y futura. ¿Amor verdadero o amor aparente? En una época en que todo es marketing y falsedades, amar verdaderamente al prójimo es toda una revolución. Una revolución que es muy mal vista por la sociedad que nos rodea.

Dios nos invita a una elección consciente y deliberada. Encontrar la paz de espíritu conlleva esta elección individual. Una elección de gran importancia dentro de las comunidades en donde deberíamos poder vivir nuestra Fe sin renegar de los carismas y dones que Dios nos ha dado a cada uno de nosotros. El amor verdadero está íntimamente conectado con la inocencia. Inocencia que no se refiere a una inocencia ingenua o infantil, sino a una pureza de intención y acción. Inocencia que nos permite ver a Dios: Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios (Mt 5, 8).  El amor que nos hace inocentes es aquel que nos guía a actuar con Bondad, Belleza y Verdad. A veces actuar así, duele porque la sociedad rechaza ver el reflejo de Dios. Es un amor que aleja del egoísmo, la malicia, egoísmo y el placer mundano, permitiéndonos vivir una vida recta y virtuosa. Este amor purifica nuestras acciones y nos ayuda a mantener una conciencia limpia. Conciencia limpia que genera la ansiada Paz interior que tanto necesitamos.

Una vida vivida en el amor verdadero al prójimo y la verdadera inocencia, prepara el camino para una muerte serena. La tranquilidad al final de la vida no es una mera ausencia de miedo, sino la paz profunda que proviene de saber que hemos vivido una vida buena, fiel a nuestros valores y a Dios. Este amor nos libera de los remordimientos y nos permite enfrentar la muerte con esperanza y confianza.

▶️ En el contexto de la evangelización digital. Al evangelizar en las redes, debemos transmitir mensajes que muestren que podemos vivir con Esperanza. Esperanza que nos ayuda a transformar cada acción que realizamos en las redes. Compartir pensamientos, textos, imágenes, videos que no den pie a que caigamos en la desesperación. El enemigo se esconde detrás de los mensajes que nos mueven al desánimo. Debemos recordar que todos tenemos el poder de elegir el amor que nos lleva a la paz interior y a la salvación. Podemos utilizar las redes sociales para compartir historias de personas que han encontrado la paz y la felicidad al vivir una vida basada en la paz, amor y la virtud. Podemos ofrecer recursos y herramientas para el crecimiento espiritual y la sanación espiritual. Porque nuestro mundo está enfermo de desesperanza e indiferencia. Como hashtag les proponemos este: #InocenciaEsPaz

▶️ Preguntas para reflexionar: ¿Qué tipo de amor estamos eligiendo en nuestra vida? ¿Amor verdadero o aparente? ¿Amor basado en ser reflejo de Dios o un amor que esconde detrás nuestros intereses personales ¿Nos estamos esforzando por vivir una vida inocente y recta? ¿Qué pasos podemos dar para cultivar un amor y paz, que nos prepare para una muerte tranquila? ¿Vemos la huella de la mano creadora de Dios en lo que nos rodea? ¿Vemos sólo la distorsión que el pecado introduce?

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