El Papa Francisco protagonizó este jueves otro de los actos tradicionales de estas fechas previas a la Navidad, el encuentro con los trabajadores del Vaticano y sus familias. Durante su encuentro, el Santo Padre quiso hacer algunas reflexiones sobre la familia, que compartió con todos los presentes.

De este modo, el Papa mostró su preocupación por las crisis que sufren algunas familias. “Voy a ser sincero. Cuando me entero de que una familia vuestra está en crisis, de que hay niños que se angustian porque los padres discuten, sufro. Por eso les pido que se dejen ayudar”, les dijo.


El Santo Padre quiso insistir mucho en este punto haciéndoles un llamamiento: “Por favor, salven vuestras familias. Sé que no es fácil. Que hay problemas de personalidad, problemas psicológicos. Hay muchos problemas en un matrimonio, pero traten de buscar ayuda a tiempo. Custodien la familia”.

Por ello, les invitó a pedir ayuda sin miedo, asegurando que “para custodiar vuestra familia podéis acudir a los capellanes, a quienes podéis pedir ayuda”.

“Sé que entre vosotros hay algunos separados, lo sé y sufro con vosotros. Pero déjense ayudar. Si la cosa ya está hecha, que al menos no sufran los niños, porque cuando los padres discuten, los niños sufren”, aseguró Francisco a los trabajadores del Vaticano.


Y les dio una clara indicación: “Nunca discutan delante de los niños, ¡nunca!”.

Por último, Francisco les dijo que “Dios te ha creado familia. La imagen de Dios es el matrimonio: hombre y mujer, fecundos‘¡Multiplíquense! ¡Tengan hijos! ¡Vayan adelante!’. Me he quedado muy contento hoy cuando he visto a tantos niños aquí, a tantas familias. Por favor, custodien a la familia”, reiteró.