El Papa Francisco recibió este lunes en la residencia Santa Marta, en el Vaticano, a Mark Zuckerberg, uno de los hombres más ricos del mundo y fundador y gerente general de Facebook, junto con su esposa Priscilla Chan.

Los visitantes se sentaron bajo el cuadro de la Virgen que Desata los Nudos -una advocación que Francisco difundió en Buenos Aires como arzobispo- y le regalaron al Pontífice un dron (pequeño robot móvil teledirigido) de la marca Facebook.

Aunque Zuckerberg es famoso por acudir a encuentros formales con ropa informal, para ir al Vaticano sí se puso chaqueta y corbata.





El director de la Oficina de prensa del Vaticano, el laico norteamericano Greg Burke, difundió que entre los temas tratados en este encuentro figuraban “cómo usar las tecnologías de comunicación para aliviar la pobreza y para animar la cultura del encuentro”. 

También hablaron, según el portavoz vaticano, de la necesidad de “hacer llegar un mensaje de esperanza, especialmente a las personas que se encuentran en mayor dificultad”.



Facebook es una red social de Internet que cuenta con más de 1.350 millones de usuarios y versiones en 70 idiomas. Sus usuarios suelen ser algo más maduros en edad que los de Twitter, permite mensajes más largos y reflexivos. Se da la circunstancia de que hace ya años que el Papa Benedicto abrió una activa cuenta en Twitter (#Pontifex) que Francisco heredó, y además el Papa argentino ha abierto cuenta en la red Instagram, mientras que a fecha de hoy todavía no hay cuenta papal en Facebook. 

Esta carencia puede haber sido otro elemento ligado a la visita del magnate que, a sus 32 años y con una fortuna valorada en 54.300 millones de dólares es considerado por la revista Forbes la sexta persona más rica del mundo y el tercero más rico en el ámbito de las tecnologías (después de Bill Gates -Microsoft- y Jeff Bezos -Amazon-). 

Posteriormente, el magnate tecnológico publicó esta nota en su cuenta de Facebook, constatando su admiración por el "mensaje de compasión y ternura" del Papa", su "calidez y gentileza" y su deseo de ayudar a las personas.

«Priscila y yo tuvimos el honor de encontrarnos con el Papa Francisco en el Vaticano. Le contamos lo mucho que admiramos su mensaje de compasión y ternura, y cómo ha encontrado nuevas formas de comunicarse con personas de cualquier fe por todo el mundo.»

«También hemos hablado de la importancia de conectar a las personas, especialmente en lugares del mundo sin acceso a Internet. Le dimos un modelo de Aquila, nuestro aparato aéreo con energía solar, que potenciará la conectividad de internet en lugares que no la tienen.»

«Y compartimos con él acerca de nuestro trabajo en la Iniciativa Chan Zuckerberg para ayudar a gente de todo el mundo. Fue un encuentro que nunca olvidaremos. Puedes sentir su calidez y gentileza, y cuán profundamente se preocupa por ayudar a la gente.»