El Papa Francisco se ha referido este martes a los atentados de Bruselas que han causado 34 muertos y unos 130 heridos llamándolos “violencia ciega que causa tanto sufrimiento” y pidiendo a Dios “el don de la paz”.

En un mensaje dirigido a los obispos belgas, ha orado pidiendo a Dios que conceda a las familias de las víctimas y a los belgas el beneficio de sus bendiciones divinas.

Al conocer los ataques sucedidos en Bruselas, que han afectado a muchas personas, el Santo Padre ha encomendado a la misericordia de Dios a los fallecidos y se ha unido en oración con todos aquellos que lloran la tragedia. Así lo ha expresado en un telegrama, firmado por el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado, dirigido a monseñor Jozef Del Kesel, arzobispo de Malines-Bruselas.

Además, el Pontífice ha expresado su cercanía a los heridos y sus familias, y a todos aquellos que contribuyen al alivio, “pidiendo al Señor que les traiga aliento y consuelo en la prueba”.


El Papa mantiene sin cambios su agenda de actos litúrgicos por la Semana Santa pese a los atentados terroristas registrados esta mañana en Bruselas y el aumento de las medidas de seguridad en Roma.

El portavoz de la sede de la Iglesia católica, Federico Lombardi, estableció que Francisco no ha decidido modificar sus actividades que incluyen varias ceremonias multitudinarias y el Vía Crucis en el Coliseo Romano.

La mañana de este miércoles 23, Francisco encabezará la audiencia general de los miércoles ante miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro. Un día después, el jueves por la mañana, concelebrará la misa crismal en la Basílica vaticana.

El jueves por la tarde celebrará la "Misa in Coena Domini", en recuerdo de la última cena, en el centro para refugiados "Cara" de Castelnuovo di Porto, en la extrema periferia de Roma.

Por la tarde del viernes presidirá la liturgia de la palabra y la adoración a la santa cruz en la Basílica de San Pedro y por la noche está previsto el rezo del Vía Crucis en la explanada del Coliseo Romano.

El sábado por la noche tendrá lugar la vigilia pascual en la basílica vaticana y un día después, el domingo de Pascua, la bendición "urbi et orbi" (a la ciudad y al mundo), al mediodía y ante miles de personas en la Plaza de San Pedro.


"Informado esta mañana sobre la noticia de los atentados perpetrados en el aeropuerto de Bruselas y en el metro de la ciudad belga, ante este nuevo acto deshumano, aseguro mi oración por las víctimas y expreso mi cercanía a sus familias", dijo el cardenal Peter Erdo, que es arzobispo de Budapest y presidente del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa añadió: "En este tiempo atormentado, invito a no dejarse sobrecoger por el miedo y rezar por la paz en Europa, en Medio Oriente y en todo el mundo".

Por otra parte, el nuncio apostólico en Bruselas Giacinto Berloco, expresó la cercanía de la Iglesia católica a todo el pueblo belga y estableció que la tragedia golpeó no sólo Bélgica, porque había personas de diversas nacionalidades en el aeropuerto.

"Que el Señor ilumine tantas personas que tienen proyectos que son contra el hombre, y cuando un proyecto es contra el hombre es también contra Dios. Y entonces rezamos al señor para que pueda iluminar las mentes y los corazones de estas personas", apuntó.

Los hechos ocurrieron este martes que el aeropuerto Zaventem, ubicado a 15 kilómetros de la capital Bruselas, con un doble atentado suicida, y otro estallido en la estación Maelbeek del metro, ubicada debajo de la sede de la Comisión Europea y del Consejo Europeo, máximos órganos de la Unión Europea (UE).