Ciento cincuenta personas sin hogar, que habitualmente se encuentran en los alrededores de la Plaza de San Pedro visitaron el jueves 26 los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina por iniciativa de la Limosnería Apostólica Vaticana guiada por el arzobispo limosnero, Konrad Krajewski.

Los huéspedes, divididos en tres grupos, cada uno de los cuales tuvo un guía, recorrieron parte del Estado de la Ciudad del Vaticano, pasando ante la Casa de Santa Marta (donde reside Francisco), el ábside de la basílica de San Pedro, la explanada de la Casa de la Moneda, el paseo de los Jardines y la Puerta de Gregorio XVI.

Una vez llegados a los Museos visitaron el Pabellón de las Carrozas, las Galerías de los Candelabros y de los Mapas y entraron en la famosa Capilla Sixtina. Terminada la visita el grupo cenó en el restaurante de los Museos Vaticano.

El Papa Francisco se encontró con los 150 huéspedes de la Limosnería. El Pontífice estrechó la mano de cada uno de ellos y les dijo: “Bienvenidos. Esta es la casa de todos, es vuestra casa. Las puertas están siempre abiertas para todos”.

El Pontífice dio las gracias a Krajewski por haber organizado la visita, que definió como “una pequeña caricia”.

Francisco pidió a los sin techo que recen por él. “Necesito de la oración de personas como vosotros”, dijo.

Pronunció una bendición sobre los visitantes pidiendo al Señor que les cuide, les ayude en el camino de la vida y les haga sentir su amor tierno de Padre.

Finalmente, el Papa los saludó uno por uno, entreteniéndose con los huéspedes más de veinte minutos.

[No hay vídeos ni fotos del evento por expresa voluntad del Pontífice, según el diario Avvenire. Nota de ReL]