"Sí, por supuesto, puedo confirmar que celebraré el Domingo de Ramos el domingo: el maestro de ceremonias papal me advirtió el lunes pasado que los ritos de la Semana Santa serían celebrados cada uno por un cardenal, y me encargaron el Domingo de Ramos". Así lo explicó a la agencia ANSA el cardenal Leonardo Sandri, argentino, vicedecano del Colegio cardenalicio, que fue Prefecto para las Iglesias Orientales de 2007 a 2022.

Ya estaba previsto que muchos de los exigentes oficios de Semana Santa los celebraran distintos cardenales, aunque se esperaba que el Papa estuviera presente en ellos, quizá presidiendo sentado.

Las autoridades médicas han comentado que el Papa tardará algunos días en ser dado de alta. Mientras tanto, serán los cardenales los que presidan esos oficios.

El Papa ingresó en el Hospital Gemelli el miércoles por la tarde por problemas respiratorios que los médicos consideran bajo control.

El cardenal Sandri añadió: "Espero naturalmente que el Papa se recupere y pueda presidir las liturgias como sucedió en otras ocasiones, aunque haya un cardenal oficiando en el altar". Nadie ha concretado la cantidad de días que debe permanecer el Papa en el hospital.

Por su parte, el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio, ha desvelado  que, según este plan, si el Domingo de resurrección, el 9 de abril, el Papa aún no es dado de alta, será él quien presidirá la Misa de Pascua. 

El Papa agradece la "cercanía y oración"

Desde su cuenta de Twitter en varios idiomas, el Papa Francisco se declara "conmovido por los numerosos mensajes que he recibido en estas horas" y agradece a todos "su cercanía y oración". Muchas diócesis y entidades eclesiales han asegurado al Papa su oración o han organizado algún encuentro de oración específico con este fin.

Leyó periódicos, rezó, recibió la Comunión

Según el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, el Papa dedicó el jueves por la mañana al descanso, la oración y atender algunas obligaciones de su cargo. Bruni aseguró que el Papa durmió bien por la noche, desayunó, leyó periódicos, rezó en una capillita privada antes del almuerzo y recibió la Eucaristía.

Bruni, en un breve comunicado de prensa, dio algunos detalles médicos: "En el marco de los controles clínicos programados por el Santo Padre se encontró una bronquitis infecciosa que requirió la administración de terapia antibiótica en infusión que produjo los efectos esperados con una clara mejoría en el estado de salud". Según los especialistas, es previsible que el Papa sea dado de alta "en los próximos días".

Una bronquitis leve

Fuentes médicas consultadas por ANSA consideran que "el uso precoz de antibióticos y antiinflamatorios es la mejor garantía de una pronta recuperación". Mientras esté en el hospital, se le podrá monitorizar adecuadamente.

La infección pulmonar que padece el Pontífice, dicen estas fuentes, es "leve", una "bronquitis" que no ha producido derrames, como se ha podido comprobar con un TAC de corazón y pulmones.

Mientras tanto, numerosos equipos de televisión y periodistas se han apostado cerca de la entrada del Policlínico.