El Vaticano necesita una nueva política de comunicación ante el escándalo de las filtraciones, y para ello ha contratado a un periodista estadounidense de la cadena Fox News y miembro del Opus Dei, para ayudar a mejorar las relaciones con la prensa.

El periodista de televisión Greg Burke y el Vaticano ratificaron el sábado lo que una fuente de alto rango de la Iglesia había confirmado a Reuters.

Burke, quien vive en Roma y trabajaba como corresponsal para Europa y Oriente Medio de la cadena estadounidense, asumirá el nuevo cargo de "asesor comunicacional" de la Secretaría de Estado, un departamento clave en el Vaticano.

El periodista de 52 años, oriundo de San Luis, Misuri, trabajó para la cadena Fox News por 10 años, y también para la revista Time. Anteriormente fue corresponsal de Reuters en Roma y ha escrito varios libros, entre ellos uno sobre un equipo de fútbol italiano.

El cargo de Burke, una revolución en la estructura de comunicaciones de El Vaticano, será similar al de los asesores de prensa de la Casa Blanca.

El periodista reportará directamente al subsecretario de Estado del Vaticano, el arzobispo Angelo Becciu, tercero en la jerarquía eclesiástica de la Senta Sede. El sacerdote Federico Lombardi seguirá en su cargo como portavoz.

"Yo les dije que no dos veces, pero cuanto más pensaba en ello, más me parecía que hacerlo (aceptar el cargo) era lo correcto. No me puedo imaginar un desafío más emocionante para mí en este momento", dijo Burke a Reuters.

Burke se convertirá en la única persona en la estructura de comunicaciones de el Vaticano que tiene una vasta experiencia en medios que no están ligados al mundo católico.

El portavoz de la Santa Sede, por ejemplo, ha trabajado para Radio Vaticano durante gran parte de su carrera pero nunca para medios laicos.

El último extranjero en asumir un cargo en la estructura de comunicaciones del Vaticano fue el español Joaquín Navarro-Valls, quien era corresponsal de prensa escrita antes de que Juan Pablo II lo designara como portavoz.

Navarro-Valls también era miembro del Opus Dei.