Conferencias episcopales de todo el mundo continúan sumándose a las múltiples reacciones individuales e interpretaciones del documento vaticano Fiducia supplicans sobre bendiciones a parejas "irregulares" y del mismo sexo.

Las primeras en hacerlo fueron Malawi, Zambia, Nigeria o Kenia (te lo contamos aquí y aquí), que interpretaron la declaración de modo que las  bendiciones se impartan "sobre una base personal, y de ninguna manera sobre un estilo de vida" (Kenia) afirmando que "no hay posibilidad de bendecir uniones ni actividades del mismo sexo" (Nigeria) o directamente negándose a implementar la declaración "para evitar cualquier confusión y ambigüedad", como han hecho Zambia y Malawi.

Hungría: "Evitar una bendición conjunta para las parejas"

Este 27 de diciembre la Conferencia Episcopal de Hungría ha emitido su propia declaración en torno a Fiducia supplicans.

"Considerando la situación pastoral de nuestro país, la Conferencia Episcopal formula como guía para los pastores que podemos bendecir a todas las personas individualmente, independientemente de su identidad de género y orientación sexual, pero siempre debemos evitar una bendición conjunta para las parejas que conviven en mera cohabitación, en un matrimonio que no es válido en la iglesia o en una pareja del mismo sexo".

Al mismo tiempo, la declaración conjunta reitera en el llamado a acompañar "con amor y respeto" a quienes viven "situaciones especiales de la vida, ayudándoles a comprender más profundamente la voluntad de Dios en el camino de vivir según el Evangelio de Cristo".

Haití: "Ningún derecho a bendecir las parejas homosexuales"

En el continente americano, también se ha pronunciado recientemente la Conferencia Episcopal de Haití.

En el comunicado conjunto, los obispos afirman: "No se otorga ningún derecho a los sacerdotes para bendecir a las parejas homosexuales que soliciten algún tipo de reconocimiento religioso de su unión".

Añaden: "Instamos a los ministros ordenados (sacerdotes, diáconos) a garantizar que las bendiciones pastorales ordinarias, no litúrgicas o no sacramentales, otorgadas a cualquiera que las solicite espontáneamente, no se otorguen de una manera que pueda interpretarlas como un acto litúrgico o semilitúrgico, similar a un sacramento. En este sentido, las uniones entre personas del mismo sexo no tienen derecho a recibir la bendición del matrimonio de la Iglesia Católica".

Haití consta de 10 diócesis, 11 millones de habitantes y en torno al 60% de católicos.

Polonia: "Las relaciones homosexuales no pueden recibir la bendición"

Junto a la húngara, la polaca es otra de las conferencias episcopales europeas que se ha pronunciado al respecto, en la misma línea:

"Dado que la práctica de actos sexuales fuera del matrimonio, es decir, fuera de la unión indisoluble de un hombre y una mujer abierta a la transmisión de la vida, es siempre una ofensa a la voluntad y sabiduría de Dios expresada en el sexto mandamiento del Decálogo, las personas que mantienen una relación de este tipo no pueden recibir la bendición. Esto se aplica en particular a las personas que mantienen relaciones homosexuales".