El párroco del Sacratísimo Corazón de Jesús de Villa Luro (Argentina), el padre César Scicchitano, acaba de firmar con la Sony para publicar un disco. 

Un disco de rock.

¿Cómo es que una discográfica internacional como Sony apuesta por un cura rockero? ¿Se ha convertido el rock católico en superventas? ¿Es el padre Scicchitano y su banda de rock, Los Pecadores, un fenómeno de masas?

No. El fenómeno de masas en Argentina tiene otro nombre: Papa Francisco. Y es que aunque Scicchitano, de 49 años y con 18 discos grabados, lleva mucho tiempo en los escenarios, lo que atrae a la multinacional es su canción "Francisco", compuesta en honor al nuevo papa, que se integra en la "papamanía" que viven Argentina y el mundo hispano en general.

Hay que admitir, eso sí, que el padre César acertó con su canción "Yo quiero un Papa latinoamericano", que es anterior a la elección de Bergoglio.



"Yo venía haciendo música desde pibe", explica el padre César, entrevistado en Clarín. En su adolescencia "no era un pibe creyente, sino una persona que se fue haciendo en la vida, en la calle. Mucha noche de café, mucha esquina: así fue mi adolescencia y mi música". Enumera lo que escuchaba y le influyó: Litto Nebbia, Cantilo, Pappo, Spinetta, Manal, Charly...

"En un momento le di mucho lugar al mundo espiritual y entré al seminario. Pensaba que la música era un hobby, aunque tocaba, muchas veces me pagaban, y tenía alumnos. Pero en el seminario, a medida que pasaba el tiempo, había algo que me faltaba adentro, y era la música. En el último año, el padre Delfino me lleva con el padre Segade, un cura músico. Él captó que a mi vida le estaba faltando música. Al principio fui con él a hacer música sacra, y con el tiempo volví a mi esencia: el rock, el adoquín, el barrio. Pude reunir el mundo espiritual con el de la música".


El padre César habla también de sus años en el seminario, en el que entró con 21 o 22 años. "Fueron ocho años en los que me pasó de todo, porque estaba en el lugar donde me formaba para lo que quería hacer y, a la vez, hacía cosas que no tenían nada que ver con mi interior. Fueron años de luz y de oscuridad, de una incertidumbre muy grande. Cuando tenía que ir a hacer los trabajos pastorales, mis compañeros estaban felices pero yo estaba deprimido. Y ahí es cuando viene este cura que me dice “¿Vos no tenías pelo largo y pantalones de cuero? Yo te hice las luces en un recital”. Y él me manda con el padre Segade".

El padre César sospecha que quizá, sin haber conseguido integrar la música en su vida de sacerdote, quizá su estado clerical "habría sido un contrato que hubiera hecho y no algo que me llena de vida".


Admite que el rock implica rebeldía, pero eso encaja con el cristianismo, porque Cristo también fue un rebelde.

"Cuando digo que Cristo tiene mucho rock, es porque tuvo esa rebeldía de dar vuelta lo que se venía haciendo. Lo que hoy está haciendo Francisco, aunque a él le gusta el tango, tiene mucho rock, porque está dando vuelta una estructura", asegura.

Respecto a su contrato con la Sony, admite el papel de su amigo el Papa: "Su primer milagro como Papa podría ser esto de que grabo con Sony. Él, como arzobispo, me había hecho cartas para presentarme a compañías, y que me escucharan, pero nunca tuve la suerte de poder llegar ahí. Pero no era como hoy, con todo el boom que implica su figura".

El estribillo de su canción "Francisco" es un leit-motiv papal: "recen por mí", repite.

"Él sabe que sin la oración no va a ningún lado. Y él se la pasa rezando por la Humanidad. Cuando asume como Papa, lo primero que hace es inclinarse ante la gente y pedirles que recen por él, que le venga esa energía para después poder tenerla para los otros. Es un acto de humildad muy grande".

Según la entrevista con Clarín, el sacerdote no tiene tan claro el tema del matrimonio entre personas del mismo sexo, posible en Argentina porque el país redefinió el matrimonio recientemente.

Aunque para la Iglesia el matrimonio es una institución natural, previa al Estado (y a la Iglesia misma), el cura rockero argentino comenta: "Es un tema civil: si lo permite la ley civil, está bien. El Papa habla en nombre de una institución; a veces un miembro de la Iglesia debe decir cosas con las que no está de acuerdo. Les pasa a muchos políticos: a veces tienen que decir lo que manda el partido. Y una cosa es no estar de acuerdo y otra es discriminar".


Y es que hay que tener las ideas muy claras en la cabeza y ser muy valiente en el corazón para aplicar la rebeldía del rock contra la imposición del matrimonio redefinido o defender la familia basada en la unión hombre-mujer que Cristo predicó.

No está claro si la Sony permitiría tanta rebeldía.