La respuesta al interrogante sobre el anticristianismo de John Lennon (19401980), que parecería ser un claro "sí" según la opinión más extendida, tendría que ser matizada. Así lo considera Ray Comfort, un predicador evangélico que acaba de publicar un libro, The Beatles, God & The Bible [Los Beatles, Dios y la Biblia] y dirigido una película, Genius [Genio] justo para defender que el compositor de algunas de las mejores canciones del cuarteto estaba evolucionando espiritualmente antes de su asesinato el 8 de diciembre de 1980.

"Como todos nosotros, tenía muchos pecados, pero no era el duro satanista, el orgulloso anticristiano y la persona que odiaba a Dios que muchos han fabricado", declara Comfort a WorldNetDaily. En su opinión, hay que poner en su contexto algunas de las pruebas del ateísmo de Lennon, y completarlas con otras.

Ray admite que en los años 1964 y 1965 Lennon declaró varias veces que los miembros del grupo eran ateos: "Pero luego maduraron en su pensamiento y comprendieron que Dios existe, y cada uno lo reconoció a su modo particular".

El año de su muerte, Lennon dijo ser "el tipo más religioso: crecí como cristiano y sólo ahora comprendo algunas de las cosas que Cristo dijo en parábolas".

George Harrison (1943-2001) escribió: "Quiero encontrar a Dios. No estoy interesado en las cosas materiales: el mundo, la fama... busco la auténtica finalidad de las cosas".

Ringo Starr (1940) también ha declarado: "En cuanto a mí, Dios es mi vida. No lo oculto".

Por último, Paul McCartney (1942) dijo en los años 90: "No soy religioso, pero sí muy espiritual". Y Comfort recuerda que rezó públicamente por su mujer cuando tuvo problemas en el embarazo de uno de sus hijos. "Dios no nos habría dado lágrimas si no hubiese querido que llorásemos", añadió.

Ray aclara que no pretende "bautizar" a Lennon ni afirmar que fuese a convertirse al cristianismo, pero sí que no responde al molde anticristiano que se ha fabricado de él.


Así, por ejemplo, su célebre canción en solitario de 1971 Imagine no es un "himno ateo", según Comfort.  Cuando la letra afirma: "Imagina que no existiese el cielo", se está afirmando que existe, alega. Y en una entrevista concedida a Playboy meses antes de morir, Lennon afirmó que lo que propugnaba en esa canción era que "las denominaciones cristianas dejaran de enfrentarse y vivieran como una sola": "Si puedes imaginar un mundo en paz, entonces, no sin religión, pero sí sin ese mi-Dios-es-mejor-que-el-tuyo, podría ser posible", dijo Lennon a la revista. 

Comfort también reinterpreta la famosa frase de Los Beatles de que eran "más populares que Jesús". Según Ray, esa respuesta se la dieron a un periodista amigo suyo y la comparación de Lennon era una crítica a la Iglesia de Inglaterra y su "espiritualidad muerta", pero en aquel momento el grupo no conocía "lo enorme que era el cristianismo en Estados Unidos". En una entrevista en Chicago en que le pidieron que aclarase la frase, el cantante añadió: "Yo no quise decir que fuésemos mejores o más grandes, comparándonos con Jesucristo como persona o como Dios o como lo que sea. Dije lo que dije, y fue un error".

Ahí quedan, pues, las alegaciones de Comfort, convirtiendo Imagine en un alegato ecumenista, y su célebre frase sobre Jesús en una crítica al anglicanismo. No son, en cualquier caso, las únicas pruebas que se han alegado sobre el anticristianismo de Lennon. La polémica, pues, continuará.