El Papa Francisco celebró misa este miércoles en la fiesta de la Virgen de Fátima y hoy especialmente pidió rezar por los estudiantes y los profesores que deben formarlos. 

“Recemos hoy por los estudiantes, los alumnos que estudian y los enseñantes que deben encontrar nuevos caminos para avanzar en la enseñanza: que el Señor les ayude en este camino, les dé coraje y también un buen éxito”, indicó el Papa.

Ya en la homilía, el Papa Francisco comentó el Evangelio de Juan que dice: “Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante, porque sin mí no podéis hacer nada”.

El Papa Francisco habla de la "permanencia" en Dios

De este modo, el Santo Padre indicó que “el Señor vuelve sobre el ‘permanecer en Él’, y nos dice: ‘la vida cristiana es permanecer en mí’. Permanecer. Y utiliza la imagen de la vid, el cómo los sarmientos permanecen en la vid. Y este permanecer no es un permanecer pasivo, un adormecimiento en el Señor: esto sería quizás un sueño beatífico”.

Francisco afirmó que este “permanecer” es recíproco, pues no sólo Dios está con el hombre, sino también el hombre con Él. Este "permanecer recíproco es un misterio", "un misterio de la vida, un hermoso misterio".

El Papa Francisco agregó en su homilía que “es verdad, los sarmientos sin la vid no pueden hacer nada porque no les llega la savia, necesitan la savia para crecer y dar fruto. Pero también el árbol, la vid necesita de los sarmientos, porque los frutos no están unidos al árbol, a la vid. Es una necesidad recíproca, es un permanecer recíproco para dar fruto".

Precisamente, el Papa recalcó que esto mismo “es la vida cristiana”.

“Es verdad, la vida cristiana es cumplir los mandamientos, esto debe hacerse. La vida cristiana es ir por el camino de las bienaventuranzas: esto debe hacerse. La vida cristiana es realizar obras de misericordia, como el Señor nos enseña en el Evangelio: y esto debe hacerse. Pero es también más: es este permanecer recíproco. Sin Jesús no podemos hacer nada, como los sarmientos sin la vid. Y Él - me permita el Señor decirlo - sin nosotros parece que no puede hacer nada, porque el fruto lo da el sarmiento, no el árbol, la vid".

La importancia del testimonio en la vida cristiana

También preguntó el Pontífice cuál es la necesidad que Jesús tiene de nosotros. El “testimonio”, respondió. “Cuando en el Evangelio dice que nosotros somos luz, dice: brille la luz que hay en ustedes, para que los hombres vean sus buenas obras y glorifiquen al Padre. Es decir, el testimonio es la necesidad que tiene Jesús de nosotros. Dar testimonio de su Nombre, porque la fe, el Evangelio, crece por el testimonio".

Jesús "necesita nuestro testimonio" para que "la Iglesia crezca". Y este es el misterio recíproco del "permanecer". Él y el Padre y el Espíritu permanecen en nosotros, y nosotros permanecemos en Jesús".