El observador permanente de la Santa Sede ante la ONU en Ginebra, monseñor Silvano Tomasi, expresó el rechazo a la violencia para resolver el conflicto de Gaza y la población palestina; e instó a respetar los derechos humanos de esta población. También llamó al diálogo para solucionar este enfrentamiento.

En una reciente intervención tras el ataque israelí a una flota de activistas que se dirigía a la Franja de Gaza, el arzobispo recordó que «una paz duradera no puede conseguirse con la violencia, sino con el respeto a los derechos y con la recíproca aceptación», informa ACI.

«Para hacer posible un diálogo concreto, es necesaria una investigación completa, imparcial y transparente sobre los últimos incidentes, basada en el derecho internacional y en el derecho humanitario internacional» de los hechos de violencia, añadió.

Es claro, dijo luego, «que las exigencias humanitarias del pueblo de Gaza no son satisfechas y que todas las partes involucradas y la comunidad internacional tienen la responsabilidad de cooperar para que los derechos humanos fundamentales de esas personas sean respetados».

«Como la Santa Sede ya ha declarado, ella se opone al uso de la violencia de cualquier parte de la que provenga. La violencia hace todavía más difícil la búsqueda de soluciones pacíficas, las únicas que pueden edificar un futuro de coexistencia constructiva», dijo luego.

Finalmente el nuncio aseguró que «mi delegación se dirige una vez más a todas las partes exhortándolas a fomentar una solución duradera del conflicto israelí-palestino a través de negociaciones que lleven a una solución a los estados, con Israel y un Estado Palestino independiente que vivan uno al lado del otro en paz y seguridad».